Presidente del Congreso sentó postura sobre sanciones selectivas en la Cámara Alta y la negativa influencia de los medios de comunicación en adopción de decisiones claves.
El presidente del Congreso Nacional, Silvio Ovelar, sostuvo hoy a un medio radial capitalino que los desaciertos del Senado y su accionar errático comenzaron cuando se vetó la juramentación de los senadores electos Nicanor Duarte Furtos y Horacio Cartes. Todo lo que vino después, señaló, se explica a partir de esa situación irregular.
“Empezamos a transgredir las normas cuando no le dejamos jurar a los senadores electos, el caso de Horacio Cartes y Nicanor Duarte Frutos. Luego pasamos a un proceso donde tomamos posiciones de acuerdo a las editoriales de los medios de comunicación, impugnamos a uno y salvamos a otro”, dijo el legislador en declaraciones a la radio 970 AM.
Esta actuación de castigo selectivo fue, a su entender, la que derivó en la votación a favor de la pérdida de investidura del senador colorado Víctor Bogado y en la “salvación” del senador liberal Salyn Buzarquis.
No obstante, señaló, él tampoco estaba de acuerdo con retirar la investidura este último parlamentario, ya que la explicación efectuada por el senador Enrique Riera no era correcta, puesto que la actuación del liberal no configuraba el delito de tráfico de influencias.
“La cámara que debía ser más racional, tuvo un golpe tremendo cuando su propio integrante dinamita las bases, como lo hizo Paraguayo Cubas, cuestionando de manera irracional todos los procedimientos reglamentarios del Senado, con un fuerte apoyo mediático. Lamentablemente los muchachos cambian de posición de acuerdo a los titulares (de los diarios)”, argumentó Ovelar.
