En las redes sociales se sospecha sobre vídeos editados y otros elementos, que ponen en duda la veracidad del intento de soborno de parte del Senador Dionisio Amarilla al periodista Juanki Lezcano de ABC Color.
Días atrás el periodista de ABC denunció, en la radio del mismo medio, un intento de soborno por parte del Senador liberal Dionisio Amarilla.
Llorando al aire, de manera dramática, afirmó en tono conmovedor: “Dionisio, mi conciencia no vas a comprar”, entre otras frases ajustadas a la ocasión.
El episodio surge después de que Lezcano publicara, en ABC, una serie de denuncias sobre supuestos manejos irregulares en una licitación del Instituto de Previsión Social.
En ese contexto, según la versión del periodista, el mismo fue invitado a una reunión en la oficina de la productora María Luz Peña, esposa de Bruno Masi. Aseguró no saber que en ese lugar se encontraban, en un sala contigua, el Senador Dionisio Amarilla y el representante de una de las firmas involucradas en la licitación denunciada, Oscar Chamorro.
Aquí surge la primera duda. El propio Lezcano -versión confirmada por la señora Peña- reconoció que ambos tienen una relación laboral previa, ya que el periodista de ABC trabaja como freelancer para la productora de la esposa de Bruno Masi.
Esto fue ratificado por Bruno Masi, quien en declaraciones a Radio UNO afirmó que Juanki Lezcano trabaja para él hace dos años, y que en ese lapso recibió muchos favores de su consultora, entre ellas la computadora más cara de la tienda Big Manzana de Apple.
Bruno Masi @brunomasitv: "Todo lo que afirma esta persona (Juanki Lezcano) no es cierto. Todo los videos que muestra están editados. Hace 2 años que trabaja para nosotros" #LMUNO
— Jorge Torres Romero (@jtorresromero) May 30, 2019
Bruno Masi @brunomasitv: "Cuando llegó a la empresa a trabajar su computadora estaba destrozada. María Luz le dijo que le compraría una y que vaya a elegir una en Big Manzana y el elige la más cara de todas. Ese gesto lo pinta de cuerpo entero, es un aprovechador" #LMUNO
— Jorge Torres Romero (@jtorresromero) May 30, 2019
Entonces, surge la primera interrogante: ¿fue realmente a su lugar de trabajo sin saber a quién encontraría? Parece imposible.
El primer vídeo difundido, con duración de un minuto, solamente está editado con las partes en las que hablan el Senador y el Sr. Chamorro.
En el audio del material no se escucha un ofrecimiento directo de dinero, sino más bien se escucha a Amarilla diciendo cuestiones como “lo que se pacta se cumple”, o que había concurrido para ayudar a su “partner de facultad”, Oscar Chamorro.
Llama la atención que en este tramo clave de la prueba audiovisual hayan cortado la intervención de Juanki Lezcano. Quizás en la parte eliminada del vídeo el periodista refiere a algún elemento que no lo deja bien parado.
Lo cierto es que después de la edición el periodista queda como una víctima, pero porque nunca habla, de él solo tenemos el silencio.
En ningún momento del vídeo se escucha la voz del periodista Juanki Lezcano, ni el ofrecimiento de soborno de parte del Senador. Tal vez haya quedado en la parte cortada que no fue incluida en la edición. Imposible saber sin el vídeo completo.
En el segundo vídeo, se muestra un diálogo entre la señora Peña y Juanki Lezcano. El vídeo nuevamente se editó de forma a que solo se ve a la mujer hablando, quien dice que cobraría la suma de 35 millones y le daría el importe de “10 cuotas de tu auto, para que estés tranquilo”.
El resto del dinero sería destinado “para los muchachos que van a hacer el institucional”.
¿Es soborno? ¿O es una conversación cerrando un pacto laboral? Lo sabríamos con certeza si se divulgaran los vídeos enteros, no editados. Pero hasta el momento se oculta la grabación completa.
Otra duda: si hablaron de 10 cuotas del auto, que según el propio Lezcano dijo eran 22 millones, ¿por qué le entregaron 40 millones en un sobre? ¿Error en el soborno? ¿O acaso hay otras conversaciones que no se conocen?
Quedaría por saber, también, por qué incriminó de manera directa al Senador de intentar sobornarlo, siendo que en los vídeos que se difundieron no se oye al mismo hablar de dinero. En todo caso, la que lo hace es la señora Peña, con quien Lezcano tiene una relación laboral desde hace dos años.
Pareciera ser que faltan algunas piezas de este rompecabezas, sumado a las dudas acerca de la credibilidad de Lezcano, que ya estuvo involucrado en cuestiones ligadas al plagio de trabajos de terceros.
Surge además la duda sobre si es compatible que Lezcano trabaje, al mismo tiempo, como consultor de políticos y como “periodista de investigación”.
Para disipar todas estas cuestiones el diario ABC, y sus medios asociados, debería cuanto antes difundir el vídeo completo. Al mismo tiempo, el periodista Lezcano debería aclarar sus labores “freelancer” como asesor de políticos.
De otra manera, tenemos derecho a sospechar un claro conflicto de intereses.