La Agencia de administración tributaria de España interrumpió una boda para cobrar impuestos impagos a la empresa encargada del buffet.
Una pareja estaba celebrando felizmente su enlace en la localidad de Badajoz (España) cuando de repente dos empleados de la Agencia Estatal de Administración Tributaria se apersonaron e increparon a la novia: «venimos a cobrar una deuda impaga de la empresa encargada del buffet».
Según informa El Comercio, la novia creía que se trataba de una broma. Imaginó que sus amigos bromistas habían contratado dos actores para sorprender a los recién casados. Pero no, era una situación real.
Si bien el blanco del operativo no eran los mismos novios (quienes ahorraron más de un año para poder realizar su casamiento como lo habían soñado) los perjudicados terminaron siendo ellos. Los agentes estatales querían saldar parte de la deuda fiscal de la empresa encargada del catering y buscaban embargar el pago. No pudieron tener peor idea que intentarlo en el peor momento. Arruinaron el festejo.
Además de los empleados de la administración tributaria, aparecieron miembros de la Guardia Civil para interrogar a la novia, quien para ese momento ya no podía sentirse más infeliz.