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domingo, noviembre 24, 2024

Terminó la campaña en Argentina: mañana se vota

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El Trueno te adelanta qué va a pasar mañana, en las elecciones generales de Argentina. La dupla de Fernández/Kirchner ganó las primarias de agosto, pero Macri no se rinde. ¿Le alcanza para acortar la diferencia con el peronismo y llegar a un ballotage? Lee la nota y enterate de todo.

Mañana son las elecciones generales en la Argentina. Aunque hay varios candidatos, los que llegan con chances reales de ganar la elección o llegar a una 2da vuelta (en noviembre) son dos: Alberto Fernández (cuya candidata a vice es nada más y nada menos que Cristina Fernández de Kirchner) y Mauricio Macri, el actual presidente, quien busca su reelección.

Macri tras las PASO: ¿un ave fénix? 

El 10 agosto fueron las primarias (PASO) y Fernández dio la sorpresa, pues se esperaba que ganase por no más de 2 puntos. Por el contrario, logró un 47,66% frente a los 32,09% de Macri, es decir, una abrumadora diferencia de 15 puntos.

Como los resultados de las PASO fueron tan contundentes, la opinión pública argentina prácticamente los consideró definitivos. Además, la economía no hizo sino empeorar desde el lunes 11 de agosto (día siguiente de la votación) y el presidente Macri perjudicó su imagen haciendo declaraciones poco felices, como cuando culpó a los argentinos de la devaluación de la moneda por haber votado a la oposición y al día siguiente les pidió disculpas, alegando que «no había dormido bien».

Entre tanto, Alberto -como le llaman en la Argentina- tomó una actitud de virtual presidente y comenzó a reunirse con mandatarios extranjeros (Pedro Sánchez, Martín Vizcarra). Además, inició charlas de «transición» con su contrincante y actual presidente.

Sin embargo, todo cambio hace casi un mes. Mauricio Macri y Alberto Fernández cortaron el diálogo y retomaron una campaña más dura. Macri pareció haber recobrado el impulso perdido tras el golpe que se llevó con los comicios de agosto.

Todo comenzó con una movilización -supuestamente espontánea- de militantes macristas que se congregaron frente a la casa de gobierno (Casa Rosada) el 24 de agosto. Enseguida Mauricio dijo que no bajaría los brazos y emprendió una caravana de 30 días en 30 ciudades.

Con participación irregular (en algunas ciudades reunió más gente que en otras), la caravana terminó el sábado pasado, con la denominada «Marcha del millón»: se trató de una manifestación en apoyo al presidente que se replicó en todas las grandes ciudades de la Argentina y en muchas capitales y grandes urbes del mundo (Madrid, Miami, París, Zúrich, entre otras). La consigna fue afirmar que «Sí, se puede» dar vuelta el resultado.

Finalmente, Macri cerró su campaña el pasado jueves en Córdoba, un día antes de que comience la veda electoral. La convocatoria fue espectacular: se calcula que la multitud llegaba casi a 100.000 personas.

En el medio, Macri y Fernández se enfrentaron en dos debates televisados donde se acusaron de corrupción e incompetencia mutuamente. Si el primer encuentro dicen los especialistas que lo ganó Alberto, el segundo -hace una semana- fue para Mauricio. Se lo vio fresco, contundente y seguro.

La pregunta es: ¿Le alcanza para «darlo vuelta»?

Los pronósticos para mañana

Es difícil confiar en los pronósticos, porque las encuestas para las PASO erraron todas. Nadie previó la gran diferencia que obtuvo la fórmula de «Alberto y Cristina». Sin embargo, los especialistas coinciden todos en que es muy difícil cambiar los resultados de agosto.

Aunque Macri logre aumentar su electorado, igual Fernández ganaría porque sobrepasa los 45 puntos necesarios para ser consagrado en primera vuelta. Macri debería «arañarle» votantes, pero no parece realista que eso suceda: la economía argentina se degrada diariamente y esta semana fue letal, casi sin poder contener el valor del peso, que parece dirigirse hacia una «hiperinflación«.

Si bien las marchas y movilizaciones macristas fueron masivas, eso no indica que sean nuevos votantes. Al contrario, los consultores advierten que son los mismos que lo votaron en agosto (más de 4 millones de personas).

¿Cuál es el objetivo de Macri? La hazaña de un ballotage o sobrevivir como líder opositor 

Mauricio Macri sabe que sus chances para mañana son mínimas. En realidad, su performance durante esta parte de la campaña fue un intento de consolidar su núcleo duro de seguidores (cerca de un 30% de los argentinos, una cifra importantísima) y cancelar la disputa por la sucesión en su espacio de centro-derecha.

Esto es así porque desde agosto se abrió adentro de «Cambiemos» una lucha interna para saber quién va a ser el nuevo líder de la oposición a partir del 10 de diciembre (cuando se produce la ceremonia de cambio de mando presidencial).

Horacio Rodríguez Larreta (intendente de Buenos Aires), María Eugenia Vidal (gobernadora de la Provincia de Buenos Aires), Martín Lousteau (legislador nacional), son algunos de quienes quieren convertirse en herederos de Mauricio Macri, quien no parece estar dispuesto a «jubilarse».

Las encuestas

De acuerdo a los encuestadores, mañana la diferencia podría mantenerse o, más probable, acrecentarse. Lo cierto es que, pese a las multitudinarias muestras de apoyo a Macri, la economía argentina pasa por uno de sus peores momentos (recesión, inflación de más del 50%, desocupación, 5 millones de nuevos pobres) y podría acercarse al desastre de la hiperinflación.

Consultora Fernández – Fernández Macri – Pichetto
Ricardo Rouvier y asociados 52,3 % 34,3%
Federico González 54% 31,5%
CIGP 51,3% 35,08%
Proyección 53,8% 33,4%
Trespuntozero 52,5% 34,8%
Gustavo Córdoba y asociados 50,3% 31,8%
Clivajes 53,7% 33,2%

Así, el consultor Raúl Timerman, prevé que la diferencia estará entre 15 y 22 puntos.

Mañana se develará la incógnita y una nueva etapa comenzará tanto en la Argentina como en la región, porque también está en disputa qué pasará con los gobiernos de centro derecha que hasta hace poco parecían dominar la política sudamericana, tras una década de gobiernos más populares de izquierda.

El lunes, como siempre, en El Trueno analizaremos qué pasó y qué pasará en la Argentina después de las presidenciales y cómo eso va a afectar a Paraguay.

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