La conmemoración, establecida por la Organización Mundial de la Salud, justo cae en día viernes. Se pretende concienciar a la gente sobre los daños físicos y sicológicos del consumo de alcohol, especialmente su ingesta excesiva.
Se conmemora hoy, 15 de noviembre, el “Día Mundial sin Alcohol”, fecha establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el objetivo de concienciar a las personas de todo el mundo sobre los daños físicos y psicológicos que produce el consumo del alcohol en nuestro organismo.
Los entendidos en la materia explican que el consumo excesivo de alcohol tiene fuertes repercusiones en el organismo, tanto en el ámbito neuronal y en el sistema nervioso central, como en los músculos.
El consumo de alcohol también tiene repercusión a nivel social: es el origen de un número elevado de accidentes de tráfico y suele ser el desencadenante de conflictos y violencia doméstica intrafamiliar.
Pese a ello, las campañas de los gobiernos contra el consumo de alcohol suelen ser muy infrecuentes y débiles, ya que el alcohol es considerado una droga “socialmente aceptada”, enfocándose mayormente en el uso de otras sustancias, como la marihuana y la cocaína.
Sin embargo, está demostrado que la ingesta masiva de alcohol general serios desequilibrios al interior de las familias y las sociedades, por el mismo hecho de que su consumo es tolerado y hasta bien visto.