La situación sanitaria en el país vecino se torna cada vez peor. Las autoridades bolivianas dieron cuenta que en un lapso de cinco días han recolectado más de 400 cuerpos en calles, vehículos y viviendas, de los cuales un 85% se consideran sospechosos de haber contraído COVID-19.
La policía boliviana informó el martes que en un lapso de cinco días recolectó 420 cuerpos en calles, vehículos y viviendas, de los cuales un 85% se consideran sospechosos de haber contraído COVID-19.
Sobre las causas de los decesos, Iván Rojas, director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), la dependencia policial que realizó el levantamiento de los cadáveres, precisó que un 15% fue por causa natural y el restante por casos confirmados de coronavirus y también bajo sospecha de la enfermedad, pues las víctimas «presentaban síntomas del virus”.
De acuerdo a la información de la que se hizo eco la agencia alemana DW, Rojas detalló que en el departamento de Cochabamba se registraron 191 levantamientos de cadáveres, en La Paz 141, en Santa Cruz 68, en Potosí 11, y en Chuquisaca 9. Sostuvo que los levantamientos se realizaron en domicilios, vía pública y en los centros penitenciarios, con la participación de los peritos de las divisiones de Homicidios y Laboratorio de la FELCC.
En La Paz, los cuerpos fueron recogidos en un barrio cercano a los hospitales.
Más de 3.000 cadáveres levantados
Autoridades del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) indicaron que del 1 de abril al 19 de julio, levantaron a nivel nacional de 3.016 cadáveres entre sospechosos y confirmados de ser portadores de COVID -19, siendo Santa Cruz el departamento con mayor cantidad de decesos, seguido de Cochabamba.
Por otra parte, el Ministerio de Salud informó mediante un comunicado que tramitan la llegada de más pruebas y equipos para descongestionar los laboratorios y habilitará varias instalaciones ante la saturación de hospitales.
En declaraciones recogidas por el diario local La Jornada, Rojas expresó su preocupación por el número elevado de casos, que puso en riesgo la vida de los efectivos policiales, ya que muchos se contagiaron con el coronavirus, pese a las nuevas medidas de bioseguridad tomadas por las unidades de la FELCC, que incluyen desinfección de los ambientes y el empleo de todos los elementos de protección.