Cuando el drama sanitario actual finalice, piden que un personal de blanco, preferentemente mujer, vaya al emblemático edificio nacional por haber estado en la primera línea de batalla de esta “guerra”.
El director general de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, propuso que cuando termine la pandemia de covid-19, que considerada una «guerra mundial», los restos de un personal de blanco, preferentemente mujer y enfermera, descansen en el Panteón de los Héroes, por ser las mayores víctimas que estuvieron al frente de la batalla.
Durante la conferencia de prensa semanal del Ministerio de Salud, el profesional habló acerca de los datos de mortalidad del personal de blanco, donde se evidencia que el 57% de las fallecidas son mujeres, principalmente enfermeras, por lo que sugirió que puedan ocupar un lugar en el Panteón Nacional de los Héroes.
Manifestó que a diferencia de la población en general, según se registran en la estadística nacional, el 57% de fallecidos del personal de blanco son mujeres. El 45% es del plantel de enfermería, la mitad, 37% médicos, aunque en números más pequeños también hay odontólogos, sicólogos.
“Gran parte del personal de blanco, 70% o más es mujer, porque el rol de cuidado del sistema de salud descansa en el rol de cuidado que tiene la mujer, socialmente… Es el personal de enfermería el que más falleció hasta ahora”, agregó.
“Con estos datos quiero proponer que cuando esta guerra acabe, espero, quiero un héroe personal de blanco en el Panteón de los Héroes, probablemente va a tener que ser mujer, probablemente, va a tener que ser enfermera, y va a ser la primera mujer en el Panteón Nacional”, remarcó.
El personal de blanco es una de las poblaciones que mejor estudiadas están en la pandemia de coronavirus, por ser el más expuesto en relación a cualquier otra profesión, principalmente los que brindan sus servicios en la unidad de terapia intensiva, mencionó.
En cuanto a la curva de fallecidos, indicó que hay médicos, enfermeros, bioquímicos, camilleros, administradores de hospitales, odontólogos, sicólogos, entre otros, que son los que atienden en los servicios de salud y tienen una alta exposición frente a la enfermedad.
“Tenemos 200 fallecidos, pero seleccionamos 176, los activos, que son los que están en los hospitales, que fallecieron en el campo de batalla. Es muy parecido a una guerra, y los campos de batalla son los hospitales y ellos son nuestros soldados”, expresó el profesional.
