La asistencia a sectores vulnerables, a través de los programas sociales implementados por el Gobierno Nacional, ayudaron a contener el aumento de la pobreza en 2020, afirmó el director de Política Macro-Fiscal del Ministerio de Hacienda, Rolando Sapriza.
Estas declaraciones las formuló durante el taller internacional virtual “Inclusión y Cohesión Social en América Latina en tiempos de pandemia: desafíos y aprendizajes para Paraguay”, informó la cartera Fiscal.
El evento fue organizado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid) y el Ministerio de Desarrollo Social (MDS), según reporta la Agencia IP.
El director Sapriza integró el panel denominado «Políticas fiscales durante la pandemia, reflexiones en torno a su papel como condición para la cohesión social». Al respecto, remarcó que los programas sociales transitorios implementados en el 2020 fueron oportunos y lograron mitigar los efectos negativos del covid-19. Mencionó que, según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), alrededor de 230.000 personas pudieron haber ingresado por debajo de la línea de pobreza si el Gobierno no implementaba los programas sociales transitorios.
Afirmó que el programa Pytyvõ, en sus diferentes versiones, y el fortalecimiento de los programas tradicionales como el programa de Pensión Alimentaria a Adultos Mayores en situación de vulnerabilidad social, fueron claves para contener el aumento de niveles de pobreza en el país. Precisó que la pobreza total de Paraguay en 2020 representó el 26,9% de la población total. Agregó que, según el INE, la pobreza hubiese ascendido a 30% si no se implementaban los programas transitorios de asistencia social.
De igual forma, el director manifestó que los programas Pytyvõ y Ñangareko fueron los pilares de protección social y transferencias monetarias, así también los pagos por cese de actividades y suspensiones laborales, realizados por el Instituto de Previsión Social (IPS). En el caso de Pytyvõ, dijo que representó una ayuda temporal correspondiente al 25% del salario mínimo vigente. Permitió que 7 de cada 10 trabajadores fueran beneficiados con el subsidio y que 1.500.000 paraguayos recibieran asistencia del Estado en los meses más difíciles de la pandemia.
Además, el director Sapriza dijo que la asistencia también fue orientada a trabajadores de frontera con Argentina, beneficiando a 24.000 trabajadores formales e informales. Añadió que el programa transitorio Ñangareko, impulsado durante la pandemia, alcanzó a 285.000 personas con una inversión de 26 millones de dólares.