Exministro de Hacienda lamentó la actitud del Congreso. Dijo que podría repetirse la fallida experiencia del año 2012 y que el Estado no será asertivo en el diseño de políticas públicas si no se tienen datos confiables, procedentes de un mapeo real de la población.
El economista César Barreto, exministro de Hacienda, cuestionó que los parlamentarios no hayan tratado los recursos para realizar el Censo de Población del 2022. Lamentó que pueda repetirse la nefasta experiencia del último censo, en 2012, que “no terminó bien” ya que hubo dificultades de implementación y solo llegó a una cobertura del 70%.
“Qué se puede objetar por parte del Congreso en este tema que es vital para la gestión de ellos mismos, porque los senadores y diputados están aprobando recursos para muchos programas con muy poca información y eso creo que aportaría a ellos mucha más realidad en función a los recursos que tienen que asignar a cada programa”, sostuvo el economista en diálogo con radio Ñandutí.
“En mi condición de ciudadano me preocupa esto porque en el 2012 hicimos mal el censo por problemas similares; hubo demora en el proceso de aprobación en los financiamientos que se necesitan para esto y hubo mucha intervención política en la implementación del censo”, aseveró.
Destacó que se necesita un censo actualizado para precisar las informaciones de la población y las condiciones de vida de los ciudadanos en los diferentes lugares del país para que desde el Gobierno brinden respuestas necesarias, mediante la implementación de políticas públicas asertivas.
Sobre el último censo realizado en el 2012, manifestó: “Se extrapoló el 70 (registrado) al 100%, haciendo una estimación en algunas zonas, con ese resultado hicimos precisiones durante 10 años y puede ser que esas proyecciones estén muy desfasadas de la realidad”, lamentó.
“Como el Censo es algo caro, no se puede hacer todos los años, se hacen las proyecciones para actualizar y para ajustar con la encuesta de hogares, pero esa es muy chica para que pueda tener una precisión alta. Puede haber cambios sustanciales que no se están teniendo en consideración para el diseño de políticas públicas y la asignación de recursos”, puntualizó.