En una entrevista realizada por Enrique Vargas Peña para ABC TV, el secretario privado del presidente de la República, Mauricio Espínola, dobló la apuesta con explosivas declaraciones sobre Santiago Peña.
Ante la celeridad con que la Fiscalía dio curso a una causa impulsada por Santiago Peña en su contra, Espínola se ratificó en sus denuncias contra el precandidato a presidente de Honor Colorado.
Aseguró que Peña es aun más peligroso que Cartes por sus ambiciones desmedidas y su obsesivo amor al dinero, sin importar la procedencia del mismo.
«¿Cómo podemos confiar en alguien que ama el dinero de ese modo? No le importa el origen del dinero, si proviene del lavado, del contrabando de cigarrillo o del sicariato», puntualizó.
«Santi sos el símbolo de impunidad, siempre fuiste cómplice, ¿qué hiciste cuando eras parte del directorio del BCP? Blanqueaste millones. ¿Cuando era ministro de Hacienda? Apoyaste el contrabando y la evasión», profundizó Espínola.
«Mauri» manifestó que en el poder Peña lideró la evasión de impuestos y el blanqueo de dinero negro generado por las actividades ilícitas del grupo Cartes.
«Cada impuesto que se evade Santi es una penicilina menos para un ciudadano , un lápiz menos para la educación de un niño , un plato de comida menos para el pueblo», aseguró.
En otro momento de la entrevista, el joven dirigente colorado denunció que los diputados reciben de Tabesa un «sueldo» de diez mil dólares mensuales, presuntamente entregado por el mismo José Ortiz a los legisladores.
Sobre esto último aseguró que cuando llegue a la Cámara Baja será para representar al pueblo y no para recibir el «dinero manchado de sangre» de alguna tabacalera.
Al mismo tiempo sostuvo que no lo harán callar con intervenciones de fiscales sometidos al cartismo.
«¿Ustedes piensan que me van hacer callar con una denuncia? Voy a seguir diciendo la verdad, porque así actúa Honor Colorado, piensan que me voy a ir a arrodillar ante el jefe y besarle el anillo», declaró el secreto privado del presidente de la República.
Finalmente hizo duros cuestionamientos a la «justicia selectiva» que le abre una causa en tiempo récord, mientras protege a personas como Érico Galeano, salpicado en el caso A Ultranza Py, a Boidanich, entre otros.
