Según el precandidato a diputado Carlos Viveros, Santiago Peña “no decide nada en Honor Colorado” y por eso perdió varias candidaturas. Aseguró, además, que las candidaturas regionales de Fuerza Republicana están mejor posicionadas.
El precandidato a diputado por Capital por el movimiento Fuerza Republicana, dijo en el programa “Polémica en el Bar”, que se emite por La Tele, que el comando del movimiento Honor Colorado tiene mucha participación, incluso más que Peña y Cartes.
“Todos le culpan a Santi que haya salido del movimiento, él me dijo yo no decido nada… Es que no decide nada (Santi), el perdió grandes candidatos de Alto Paraná, Capital, el no decide. Por eso lo que yo siempre digo, para mí ni siquiera la preocupación es Santi, no es Horacio. Para mí la preocupación son los que están atrás de los grandes liderazgos”, recalcó Viveros.
El precandidato a Diputado por la Lista 3 afirmó que “Calé Galaverna, un Trato Apua, un Bachi Núñez esos son los que van a cortar la torta, a no ser que muestren lo contrario. Pero esta es una realidad yo no tengo nada en contra de estas otras dos personas grandes líderes (Santiago Peña y Horacio Cartes) del movimiento, pero no deciden”, reafirmó.
Mencionó que debido a esta situación, Peña perdió grandes candidatos de los departamentos de Alto Paraná y Capital.
Aseguró que en todos los departamentos y los espacios figura Fuerza Republicana con mayor caudal electoral, y la prueba se da en Caaguazú, donde el senador Silvio Ovelar pretendía erigirse como el único dirigente, ahora “se enfrenta a cuatro poderosos”, que son Marcelo Soto, Carlos Núñez, Mario Varela.
“En Capital es lo mismo, ellos dicen que van a tener 36%, pero, sin embargo, figura que nosotros vamos a meter más candidatos en Capital, y lo manejan ellos mismos. Acá hay una realidad muy clara, a encuesta tenemos que dejarnos de joder. Hace 7 años que venimos manipulando a la gente, no te vayas con él, porque no va a ganar”, enfatizó.
Recordó que en el 2017 en las internas coloradas entre Santi – Marito, Peña tenía una diferencia de 10% a 20% en las encuestas, pero perdió por 88.000 votos. Peor aún fue en las generales, donde Abdo tenía una intención de votos entre el 20% al 30%, sin embargo, ganó por solo el 3,7% de diferencia.