Mario Abdo se mostró esperanzado en que la Celac se convierta en un espacio de debate sincero y de integración donde se pueda hallar soluciones a las necesidades de la región.
Fue lo expuesto durante su intervención en la VII Cumbre de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que se desarrolló este martes en Buenos Aires.
“Habiendo escuchado a todos los que antecedieron en el uso de palabra puedo decir que, siendo está mi última intervención como presidente de mi país, me voy con esperanzas de que este foro se convierta en un espacio de encuentro y en este caso de reencuentro”, expresó al iniciar su discurso.
Dijo que la Celac debe convertirse en un espacio de debate sincero y de integración, no así de intromisión, donde se pueda hallar soluciones a crisis que acechan a las democracias. “Paraguay está aquí porque cree firmemente en la integración donde se respete la democracia y los derechos humanos”, subrayó.
Debemos construir un destino común para la región
De igual forma, apeló a la construcción de un destino común para la región, basado en una hoja de ruta para conectar al mundo, un destino donde no se requieren afinidades políticas absolutas pero sí de respetos, alejados de las polarizaciones que impiden encontrar vías de solución para nuestros pueblos.
Señaló que el mundo está viviendo momentos difíciles pero también de grandes complejidades y es por ello que, abogó por una estrategia para unir la región, Latinoamérica y el hemisferio.
Este tiene que ser un espacio donde no busquemos una compensación para las injusticias del pasado porque si miramos el pasado con rencor y con odio no vamos a poder construir lo que más le importa a las nuevas generaciones, que es el futuro, remarcó.
“Me siento con esperanzas después de haber escuchado tantas palabras acertadas que nos demuestran que un futuro unido latinoamericano es posible y una estrategia común para buscar el desarrollo de nuestra región, de nuestro pueblo, pero el diálogo tiene que ser sincero”, enfatizó.
El camino de la violencia no es el camino de la democracia
En un momento de su alocución, lamentó los hechos ocurridos en Perú y en Brasil. Sobre el punto, afirmó que el camino de la violencia no es el camino de la democracia y que no se puede avanzar sin el fortalecimiento de la conciencia y ante todo, el sistema democrático.
“Debemos valorar a la democracia y no contaminar los procesos de integración con las visiones ideológicas», dijo, y en ese orden, señaló que si bien los debates enriquecen a la democracia no deben impedir la construcción de un destino común para los pueblos y la región.
«La democracia como sistema de gobierno si bien inicia con elecciones libres, periódicas y transparentes, no culmina allí, las elecciones nos dan legitimidad de origen pero el verdadero desafío está en ejercer el poder garantizando la pluralidad política, la dignidad humana, la libertad de expresión, el respeto al Estado de Derecho, la separación y la independencia de los poderes», exteriorizó.
Éxodo masivo de venezolanos, motivo de preocupación
También se pronunció sobre la crisis migratoria de ciudadanos venezolanos que según datos de Acnur, es la segunda crisis de desplazamiento externo de mayor magnitud en el mundo y “no podemos mirar a un lado, cuando más de siete millones de venezolanos han abandonado sus hogares”, añadió.
“Una agenda de integración regional exitosa desde la perspectiva de Paraguay debe ser orientada a programas y acciones concretas que se traduzcan en un beneficio tangible y real para nuestros pueblos. Hay temas en los que convergen intereses de todos los países, en lo que claramente podemos avanzar como el combate a la pobreza, la conectividad física, la producción sostenible de alimentos y la lucha contra el crimen organizado”, detalló.
Crimen de Pecci: agradeció colaboración de Colombia y El Salvador
Respecto a este último punto, aprovechó la ocasión para agradecer a las autoridades de Colombia y El Salvador para esclarecer el asesinato del fiscal paraguayo, Marcelo Pecci, ocurrido el 10 de mayo del año pasado en la Isla Barú, en la ciudad de Cartagena de Indias. En ese contexto, mencionó que esa es la muestra de que solo a través de la cooperación internacional se puede dar respuesta efectiva contra la criminalidad organizada.
“Paraguay estará siempre dispuesto a dialogar con franqueza y honestidad, sobre el gran proceso de integración y el desafío que tenemos como región”, sentenció.