Paranaländer le entrevista al pintor guaireño Arsenio Aguilar, quien bajo el influjo telúrico del Ybytyruzu pinta, modela, publica libro sobre su arte, sigue estudiando, guairanizando un poco el mundo cada día.
– ¿De dónde sos, que haces ahí donde vivís?
Soy de Villarrica del Espíritu Santo, donde nací en 1983. Me encuentro trabajando, pintando, y también estoy cursando la carrera de Arquitectura en la Universidad Nacional de Villarrica FIA-UNVES.
– ¿Tu educación artística cómo fue, y qué tipos de arte realizas?
Educación artística no tuve, soy autodidacta. La ciencia y el arte me atrajeron desde la infancia, siempre me gustó experimentar y crear, de chico lo realizaba a diario de cualquier tema que me llamaba la atención. El arte también da bastante para experimentar. Hago principalmente, pintura al óleo, con una variada temática. También hago escultura y cerámica.
-Profundizando más en tu biografía, ¿qué podes contarnos?
Hice la primaria y secundaria en Villarrica. Desde que tengo memoria hice escultura y dibujo, mientras experimentaba con diversos tipos de artilugios que consumían mi concentración e imaginación, o escapaba de casa por la noche buscando algún prado sin contaminación lumínica para presenciar el cielo estrellado con muchas preguntas en la cabeza sobre el misterio de aquella verdadera magia ubicada sobre nuestras cabezas. Al culminar la secundaria poseía toda una colección de obras, enseguida obtuve invitaciones para exposiciones en centros culturales y espacios privados, también propuestas para enseñar. Viaje a Asunción unos años invitado ya por haber sobresalido en el medio artístico. En estos momentos buena parte de mis obras se encuentran en colecciones privadas en Paraguay y en diversos países del extranjero. También he diseñado portadas para libros de distintos escritores (“Estampas norteñas” de Luis Alberto Ramírez, “El grito del mensú. Cuentos del Paraguay” de Pedro Juan Paredes Argüello, “La hora de San Blas” de Mara Vacchetta, etc.), portadas de discos de música, entre otros. Realicé una campaña de concienciación usando como medio una instalación. Enseñé escultura varios años en la Escuela de Arte Municipal de Villarrica, actualmente no estoy enseñando, ya que buena parte del tiempo me ocupa la facultad.
-Háblanos un poco de tu libro “POLINIZACIONES” (Fondec, 2018).
El libro trata sobre arte, sobre mis obras. Tiene texto de contratapa del poeta guaireño Jacobo Rauskin:”su obra es una cifra promisoria en la pintura paraguaya actual”. El prólogo es del poeta Ramiro Domínguez. La artista Lucy Yegros también añade: “detrás de toda su obra hay un mensaje: a partir de algo mínimo se puede formar todo un universo”. Y un epílogo firmado por la psicoanalista Mara Vacchetta Boggino.
-Contanos de tus lecturas o gustos musicales y cinematográficos.
Disco: folclórico, rock…
Libros: suelo leer las veces que encuentro espacio, ya que al estar trabajando y estudiando arquitectura me ocupa buena parte del tiempo, leo temas variados.
Películas: he visto casi de todo, los clásicos, futuristas, de acción, drama,etc. sean las películas viejas o las nuevas. Justamente desde el año pasado empecé a ver películas viejas, de los años 40 50 60, cada vez que puedo. Es interesante los detalles, paisajes, personajes, los encuadres de las tomas, etc.. -Describenos el lugar donde trabajas, el perfil de tu Villarrica.
El lugar donde trabajo se podría describir como un punto de transición entre la zona urbana y el campo. Me encuentro felizmente rodeado todavía por algo de naturaleza, me gusta eso.
En cuanto a Villarrica, se lo conoce como la culta y andariega, tuvo que mover su ubicación varias veces para escapar de los bandeirantes. Se puede ver desde aquí la imponente cordillera del Yvytyrusu, situada hacia el este, a pocos kilómetros. Cuna de grandes exponentes de la cultura paraguaya.
-¿ Influencias sobre vos o tu arte que puedas comentarnos?
En cuanto a influencia, no poseo una marcada influencia por algún artista del pasado en específico. Más bien podría expresar que tengo atracción por la forma de trabajar de varios maestros del renacimiento y del barroco. Mis fuentes de influencias son la naturaleza, la imaginación, la ciencia, los sueños; la filosofía, psicología, psicoanálisis, leyendas, política, las cuestiones sociales, ambientales, religiosas, etc. Es decir, me interesa el contenido en una obra, lo que se puede aportar o descubrir a través de ella. Por eso, en muchas de mis obras se observan mensajes y simbolismos. Es posible hacer ciudadanía desde el arte, mientras se tiene también presente el disfrute.