Hasta ahora, Pekín no había autorizado el uso en su territorio continental de este tipo de vacunas contra el covid-19 desarrolladas en el extranjero, como las de Pfizer-BioNTech y Moderna.
La farmacéutica china CSPC Pharmaceutical Group Ltd, anunció este miércoles que su vacuna de ARN mensajero contra el covid-19 ha recibido aprobación de las autoridades chinas para su uso de emergencia, convirtiéndose en la primera de ese tipo autorizada en el país asiático.
La empresa informó a la Bolsa de Hong Kong, donde cotiza, que la Comisión Nacional de Sanidad y la Administración Nacional de Productos Médicos del gigante asiático dieron luz verde a su vacuna, llamada SYS6006. Según la empresa, se realizó un estudio clínico entre el 10 de diciembre de 2022 y el 18 de enero de 2023 en el que se observó una protección del 70,2 por ciento entre el séptimo y el 28º día tras la inmunización y del 85,3 % entre el 14º y el 28º día.
En el estudio se analizaron cuatro mil casos de inmunizaciones realizadas con la SYS6006, en las que «la incidencia de efectos adversos fue relativamente baja y su gravedad, leve».
La campaña de vacunación en China continental se ha basado en vacunas producidas por las empresas nacionales Sinovac, Sinopharm y CanSino, que emplean vectores inactivados del virus, una de las plataformas vacunales más tradicionales y seguras que existen pero cuya eficacia es menor que la de las basadas en ARN mensajero, vacunas que hasta ahora habían sido rechazadas por China, decisión que le ha valido al país asiático críticas por parte de expertos internacionales.
El pasado 8 de enero, las autoridades redujeron de la categoría A -nivel de máximo peligro- a la B, de gestión del covid-19, marcando así el final de la política de ‘cero covid’. A la retirada de las restricciones le siguió una oleada de infecciones en todo el país, durante la cual se registraron momentos de gran presión hospitalaria.