“Si no hay una propuesta donde pueda ganar la renovación, no me voy a prestar a ninguna de las dos jugadas”, afirmó el senador Salyn Buzarquis. Confirmó que hay varios convencionales que no participarán en ninguna de las convocatorias.
Prosigue el conflicto interno en el Partido Liberal Radical Auténtico, que prevé para el domingo 6 de agosto, la realización de la convención extraordinaria, que tiene como escenario dos locales diferentes convocados por distintos sectores, demostrando una marcada división.
El senador del PLRA, Salyn Buzarquis, sostuvo que la centenaria agrupación política está muy mal y le preocupa que persista la disputa por la doble convocatoria a convención extraordinaria.
Hasta el momento se prevén dos lugares para la realización de la convención que definirá la posición política de esta nucleación tras la derrota en las elecciones generales del 30 de abril, y se establecerán las autoridades partidarias.
“Hay que entender que en el Partido Liberal las cosas no están bien, el partido está muy mal, yo estoy preocupado, a mí por lo menos me interesa el partido, me parece una vergüenza que estos dos grupos radicalizados desde hace tiempo, no pueden ponerse de acuerdo en un local, comenzando por ahí”, expresó.
“Los dos sectores quieren hacer una convención en dos estadios. Cómo uno puede debatir, decidir el futuro de su partido, con hinchada, con barra brava, con actos de patoterismo. Dios quiera que por ahí no pase a mayores”, agregó.
En diálogo con los periodistas acreditados ante el Congreso Nacional, el dirigente liberal aseguró que no se prestará a la jugada de ambos sectores radicalizados, si no se llega a un consenso para definir la sede de la convención.
“Yo estando, así las cosas, si no hay una propuesta superadora donde realmente pueda ganar la renovación y un recambio, yo no me voy a prestar a ninguna de las dos jugadas. Personalmente no voy a ir, estoy muy de acuerdo con una idea de muchos convencionales que dicen que no van a participar a ninguno de los dos actos, porque me parece que es una vergüenza”, acotó.