En el día de su 18 cumpleaños, la princesa Leonor de España prestó juramento a la Constitución en un acto solemne en las Cortes Generales, y haciendo uso de la misma fórmula que empleó su padre, el rey Felipe VI, el 30 de enero de 1986.
Sobre el mismo ejemplar de la Carta Magna ha clamado: «Juro desempeñar fielmente mis funciones, guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes y respetar los derechos de los ciudadanos y de las comunidades autónomas y fidelidad al rey».
El juramento está previsto en el artículo 61 de la Constitución, en el que se establece que «el Príncipe heredero, al alcanzar la mayoría de edad, prestará juramento».
Con este acto cargado de simbolismo, de enorme trascendencia jurídica e histórica y que abre una nueva página en la historia monárquica española, la princesa Leonor ha escenificado la continuidad de la monarquía parlamentaria y se ha convertido de pleno derecho en la heredera del trono.
Con su mayoría de edad y conforme a lo previsto en la Carta Magna en caso de muerte, incapacidad o abdicación de Felipe VI, podría suceder a su padre de forma inmediata. Hasta ahora, si esto se hubiera producido, estaba prevista la regencia de su madre, la reina Letizia.
Leonor de Borbón, que se convirtió en princesa heredera cuando Felipe VI fue proclamado rey el 19 de junio de 2014, ha protagonizado el hito más importante de su trayectoria institucional, tras jurar la bandera en Zaragoza el pasado día 7.
El solemne acto ha tenido un desarrollo casi idéntico al de Felipe de Borbón en cuanto a la puesta en escena en el hemiciclo. Este juramento ha tenido como eje central esta sesión ante las Cortes Generales, en presencia de diputados y senadores, y se ha completado con otro acto en el Palacio Real, donde Felipe VI ha impuesto el Collar de la Orden de Carlos III a su heredera.
La princesa Leonor, vestida con traje de chaqueta blanco, ha jurado ante el mismo ejemplar de la Carta Magna que utilizó Felipe de Borbón, aunque se le ha añadido un encarte que incluye los dos artículos modificados desde entonces, el 13 para el voto de ciudadanos comunitarios y el 135 de la estabilidad presupuestaria. Ha recibido cuatro minutos de aplausos tras su juramento, que Leonor ha agradecido con gestos.
El acto se ha producido bajo la atenta mirada del rey Felipe VI, la reina Letizia y su hermana, la infanta Sofía. Tras jurar, la princesa ha dado un beso a sus padres y ha tenido un gesto cariñoso con su hermana. El rey emérito Juan Carlos I ha sido el gran ausente de la ceremonia, después de su distanciamiento de la familia real tras su ‘exilio’ a Abu Dabi en agosto de 2020. Tampoco ha acudido la reina Sofía. Ambos estarán, eso sí, en el encuentro privado familiar por el 18 cumpleaños de la heredera con el que se cerrará esta jornada en el Palacio de El Pardo.
En 1986, la familia real estuvo al completo en el estrado presidencial del salón de sesiones arropando al entonces príncipe Felipe de Borbón, al que acompañaron sus padres, los reyes Juan Carlos y Sofía; sus hermanas, las infantas Elena y Cristina; además de su abuelo, don Juan de Borbón, que, aunque no reinó, su presencia se interpretó como símbolo del pasado, presente y futuro de la dinastía.
Tanto la Casa del Rey como el Gobierno han puesto en valor en los últimos días la importancia de este acto institucional y su trascendencia para España.
«Es un acto de enorme transcendencia institucional, simbolismo histórico y compromiso personal», le recordó Felipe VI a su hija en su discurso en los Premios Princesa de Asturias en Oviedo el pasado día 20. Momento en el que la propia princesa reconoció su deber y responsabilidades como heredera ante la «complejidad del mundo».
En el estrado presidencial, por tanto, se han situado los reyes, la infanta Sofía, y también el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, la presidenta del Congreso, Francina Armengol, el presidente del Senado, Pedro Rollán, y los miembros de las Mesas de ambas cámaras.
Fuente: RTVE.
