En un operativo sin precedentes, fuerzas policiales y militares ingresaron a la Penitenciaría de Tacumbú de manera a retomar el control del lugar, que se encontraba en manos del Clan Rotela. Armando Rotela fue tomado y trasladado a Viñas Cue.
En un movimiento sin precedentes, el Gobierno realizó un operativo conjunto policía-militar en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú denominado Veneratio. Este esfuerzo busca recuperar el control institucional del lugar y dar un golpe al microtráfico, que como es sabido era manejado por las bandas criminales desde el penal.
En una acción que comenzó minutos antes de las 05:00 horas del día de hoy, se desplegaron 1.500 agentes policiales y 1.000 militares, en lo que se considera uno de los mayores movimientos operativos de este tipo en la historia del país, buscando tomar el control en la principal penitenciaría.
Entre los objetivos establecidos por los organismos de seguridad se encuentran la finalización de privilegios y abusos de poder por parte de bandas criminales que operan en el penal. Además, se busca mejorar la distribución de los internos, garantizando una custodia más efectiva y promoviendo su reintegración social.
La recuperación total de la presencia estatal en la gestión administrativa y de seguridad del territorio penitenciario es también un punto focal del operativo. Igualmente, se busca interceptar, controlar y eliminar el presunto sistema de distribución de estupefacientes desde Tacumbú, el cual tiene un impacto negativo en una amplia cantidad de jóvenes en la región.
En el operativo se pudo llegar hasta Armando Rotela, quien manejaba un pabellon y es lider del grupo criminal Clan Rotela que mantuvo la penitenciaría en zozobra durante mucho tiempo. El reo será traslado hasta la cárcel militar de Viñas Cue.
Además de Rotela, cerca de 700 internos fueron trasladados a otras cárceles del país con el objetivo de desbaratar la férrea organización que tenía el Clan Rotela en Tacumbú.
Lamentablemente, durante el desarrollo de la operación se reportaron 14 efectivos y 2 internos heridos, siendo atendidos en su totalidad. Dos oficiales continúan en procedimientos quirúrgicos. Además, se confirmó el fallecimiento del joven policía Martín Mendoza, miembro del Grupo Lince. En respuesta a este trágico incidente, el Ministerio del Interior emitió un comunicado expresando sus condolencias.