El presidente argentino, Javier Milei, resolvió prohibir el uso del lenguaje inclusivo y la perspectiva de género en la administración pública. Así también se informó que evitará “la innecesaria inclusión del femenino”.
El Gobierno de Argentina ha anunciado la prohibición en toda la administración pública del uso del lenguaje inclusivo y la perspectiva de género, argumentando que estas prácticas “se han utilizado como negocio de la política”.
Esta medida llega apenas horas después de que el Ministerio de Defensa también confirmara una acción similar.
Manuel Adorni, portavoz presidencial, explicó que la medida implica que las administraciones no podrán utilizar lenguaje de género neutro ni símbolos como el arroba o la equis. Además, se evitará “la innecesaria inclusión del femenino”, afirmó Adorni ante los medios.
“El lenguaje que contempla a todos los sectores es el que utilizamos en la lengua castellana, es el español”, justificó Adorni, argumentando que no ve necesario introducir nuevas “estructuras” para dar cabida a otras sensibilidades.
El ministro de Defensa, Luis Petri, estableció también el lunes “la obligatoriedad del idioma castellano, conforme a las normas de la Real Academia Española”, con el objetivo de “eliminar formas incorrectas del lenguaje” que puedan “generar una interpretación errónea” y afectar incluso al desarrollo de operaciones militares.
“Las comunicaciones en el ámbito de la Defensa Nacional deben ser breves, claras y concisas de acuerdo con lo que establecen los reglamentos militares correspondientes”, señala una resolución del Ministerio, que advierte con medidas contra quienes incumplan estas nuevas directrices.
Este veto ha generado controversia y críticas por parte de grupos defensores de los derechos de género, quienes consideran que estas medidas representan un retroceso en la lucha por la igualdad y la inclusión.