Carlos Mateo Balmelli, dirigente del PLRA, señaló que el partido ha perdido su dirección histórica y carece de un discurso convincente para el electorado, situándolo en una posición desfavorable para futuros comicios.
El Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) se encuentra en una situación crítica, según Carlos Mateo Balmelli, analista político y dirigente de la agrupación tradicional. En una entrevista con la 1020 AM, Balmelli expresó que el partido ha perdido su rumbo histórico y se ve atrapado en pequeñas querellas, lo que ha llevado a una falta de contenido en sus discursos y a una desconexión con el electorado paraguayo.
“No hemos sido ni siquiera voceros de grupos marginales, el Partido Liberal Radical Auténtico perdió su rumbo histórico entre pequeñas querellas”, afirmó Balmelli. Añadió que los liberales están sin dirección y sin el contenido necesario para convencer al electorado en los próximos comicios. «Estamos castrados como partido. No existen fundamentos históricos ni fácticos que digan que los liberales pueden aspirar al poder, solo podemos aspirar a un cómodo tercer puesto en las próximas elecciones», sostuvo.
El pasado miércoles, los liberales celebraron 137 años de fundación de su nucleación, inicialmente denominada Centro Democrático. A pesar de los intentos de algunas altas autoridades y dirigentes por impulsar la unidad partidaria tras la destitución de Efraín Alegre de la presidencia, los conflictos políticos y financieros persisten bajo el liderazgo de Hugo Fleitas.
“El liberalismo no cumple su rol opositor. Estamos en una situación incómoda, parece que el esqueleto de la esperanza se desquebrajó en el PLRA. Los liberales insertos en el conjunto de la oposición estamos perdidos, sin orientación y discurso. El liberalismo no cumple con su rol opositor, no asume su trascendencia histórica”, agregó Mateo Balmelli.
Balmelli enfatizó la necesidad de un cambio de discurso dentro de la agrupación tradicional para ganar el respaldo ciudadano. “Acá es muy simple, cambiar o morir”, sentenció. En la actualidad, los liberales, principalmente del sector oficialista, mantienen el cuestionado discurso de hacer “oposición por oposición”, sin propuestas sólidas.