El avión C-130 de la Fuerza Aérea Uruguaya llegó a Paraguay este jueves y operará desde Mariscal Estigarribia para apoyar las tareas de extinción de incendios en la región del Cerro Chovoreca. La cooperación es sin costo para el Estado paraguayo.
Este jueves, antes del mediodía, arribó al país el avión hidrante C-130 de la Fuerza Aérea Uruguaya, destinado a apoyar en las tareas de extinción de incendios forestales en el Chaco paraguayo. La aeronave se trasladará inmediatamente a su base de operaciones en Mariscal Estigarribia, desde donde se coordinarán los trabajos en el área afectada, especialmente en las inmediaciones del Cerro Chovoreca.
El ministro de Defensa Nacional, Oscar González, informó que las operaciones del avión comenzarán de inmediato, una vez que se complete el reabastecimiento de combustible. La aeronave tiene la capacidad de transportar hasta 16.000 litros de agua, los cuales pueden ser descargados en fracciones de 1.000 litros o en su totalidad, dependiendo de la magnitud del incendio.
Para facilitar el abastecimiento del C-130, se han desplegado en el aeropuerto de Mariscal Estigarribia cuatro camiones cisterna con capacidad de 10.000 litros cada uno. Según González, «el Estado paraguayo está poniendo todo lo necesario para combatir el fuego» y se cuenta con mejores recursos para estas tareas.
Además de la aeronave uruguaya, el operativo cuenta con casi 100 efectivos militares en tierra, bomberos voluntarios, y personal de la Secretaría de Emergencia Nacional. Julio Fullaondo, comandante de la Fuerza Aérea Paraguaya, destacó que el avión C-130 trabajará en conjunto con dos helicópteros UH-1 equipados con sistemas «Bambi», que transportan y descargan hasta 1.000 litros de agua, así como con dos aviones Casa 212, utilizados para el transporte de combustible, personal y suministros.
El comandante Fullaondo expresó confianza en que «con la ayuda de esta aeronave, el trabajo será mucho más rápido y efectivo». Por su parte, el ministro González reiteró que todas las acciones están coordinadas bajo la directiva del presidente Santiago Peña, quien ha ordenado que no falte nada para que el combate a los incendios sea eficiente.
