Seguidores de Evo Morales bloquearon rutas en Cochabamba en rechazo al posible arresto del expresidente por acusaciones de abuso a una menor. La policía se enfrenta a los manifestantes mientras el gobierno asegura que intervendrá para desbloquear las vías.
Cientos de seguidores de Evo Morales bloquearon este martes las principales vías del departamento de Cochabamba, en el centro de Bolivia, en el segundo día de protestas en rechazo a la posible detención del expresidente, acusado de estupro, trata y tráfico de personas. Los manifestantes, que se oponen a la investigación judicial, acusan al gobierno de llevar a cabo una persecución política contra Morales.
Humberto Claros, dirigente campesino, denunció que el proceso contra Morales es «absolutamente montado» y planificado «a oscuras», sugiriendo que se trata de una estrategia para desacreditar al exmandatario. Según fuentes del partido de Morales, el expresidente se encuentra resguardado en la región de Chapare, en Cochabamba, mientras continúa la agitación en las calles.
Los enfrentamientos más intensos se registraron en Parotani, una localidad estratégica en la ruta que conecta Cochabamba con La Paz. Manifestantes encendieron fogatas y lanzaron piedras, mientras la policía intentaba despejar la carretera utilizando gases lacrimógenos, sin lograr dispersar a la multitud.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, anunció que la policía intervendrá para desbloquear las vías y que «cada punto de protesta va a ser intervenido». Sin embargo, también aclaró que hasta el momento no ha recibido ninguna orden de arresto contra Morales, afirmando que si dicha orden llega, la policía tendrá que cumplirla conforme a la ley.
Evo Morales, quien fue presidente de Bolivia desde 2006 hasta 2019, rehusó comparecer a una citación del Ministerio Público relacionada con los cargos en su contra. Ante su negativa, la fiscal del caso, Sandra Gutiérrez, advirtió que podría emitir una orden de arresto, aunque su anterior intento de aprehensión fue anulado tras una apelación judicial.
Además de estas acusaciones, Morales ha sido citado para declarar como testigo el próximo 21 de octubre en un juicio relacionado con la muerte de civiles durante la crisis política de 2019, año en el que renunció a la presidencia alegando ser víctima de un «golpe de Estado». En este juicio, la exmandataria interina Jeanine Áñez es la principal acusada por los hechos ocurridos tras la salida de Morales del poder.