En una visita a las áreas devastadas por las inundaciones en Valencia, los reyes Felipe VI y Letizia, junto al presidente del gobierno, Pedro Sánchez, enfrentaron insultos y el lanzamiento de barro por parte de la población local, que exigía respuestas a la crisis.
La visita de los reyes de España, Felipe VI y Letizia, y del presidente del gobierno, Pedro Sánchez, a las zonas afectadas por las históricas inundaciones en Valencia, terminó en tensiones y agresiones por parte de los habitantes. Durante el recorrido por el municipio de Paiporta, una mujer a poca distancia de la reina Letizia gritó: “Que se vayan”, mientras el tumulto coreaba “asesinos” y arrojaba barro y objetos hacia las autoridades.
Felipe VI fue alcanzado por el lodo lanzado por los manifestantes y, a pesar de la situación, intentó continuar el diálogo con la multitud durante más de una hora, escoltado por sus guardaespaldas. Sin embargo, las tensiones aumentaron, y tanto él como la reina tuvieron que retirarse, cancelando una segunda visita al municipio de Chiva.
El presidente Pedro Sánchez, quien fue evacuado del lugar por su equipo de seguridad tras intensificarse las agresiones en su contra, fue trasladado a un puesto de mando avanzado. Los servicios de seguridad activaron el protocolo ante el riesgo que representaba la situación, nunca antes vista en España.
La ira de la población se desató ante la falta de respuestas rápidas a la catástrofe que ya ha dejado un saldo de 217 muertos, 213 de ellos en Valencia. Entre las víctimas más recientes se encuentran tres personas halladas en Pedralba, Valencia, y una anciana en la vecina Castilla-La Mancha, cuyo cuerpo fue arrastrado por las aguas durante 12 kilómetros.
El presidente regional de Valencia, Carlos Mazón, también fue evacuado en medio de los disturbios.