El presidente Javier Milei enfrenta crecientes pedidos de juicio político tras promocionar el token Libra, que se desplomó drásticamente y generó pérdidas millonarias, beneficiando solo a unos pocos inversores.
El presidente de Argentina, Javier Milei, se encuentra en el centro de una polémica tras su promoción en redes sociales del token Libra, una criptomoneda que, según expertos, se vio envuelta en un esquema de «pump and dump». Milei, en un tuit que fue posteriormente borrado, afirmó que el proyecto incentivaría el crecimiento económico al financiar pequeñas empresas, lo que impulsó a miles de usuarios a invertir. Sin embargo, el token, que inicialmente se cotizaba a 5 dólares, cayó abruptamente a 0,6 dólares en cuestión de horas, generando pérdidas devastadoras para la mayoría de los inversores.
La maniobra ha desatado una fuerte reacción en la esfera política, con opositores denunciando que la promoción de Milei constituye una estafa. Diversos sectores ya han anunciado pedidos de juicio político, acusándolo de violar la Ley de Ética Pública, la Ley de Entidades Financieras, y de incurrir en delitos de lavado de dinero y defraudación. En las redes, hashtags como “Milei estafador” y “Presidente Ponzi” se han viralizado, reflejando el descontento generalizado.
Representantes de la oposición sostienen que el escándalo revela una negligencia grave en la gestión de información privilegiada y la promoción irresponsable de activos digitales, afectando a miles de argentinos. Mientras tanto, Milei se ha defendido alegando que publicó el tuit sin conocer todos los pormenores del proyecto y, una vez informado, decidió retirarlo para evitar mayores consecuencias.
La controversia continúa generando intensos debates sobre la ética en la gestión de inversiones y la necesidad de tomar medidas firmes para proteger a los ciudadanos, y ya se espera que los procesos legislativos inicien el juicio político contra el presidente en los próximos días.