La ceremonia será presidida por el cardenal Giovanni Battista Re y reunirá a líderes mundiales. El cuerpo del pontífice será sepultado en la Basílica de Santa María la Mayor, según su expreso deseo de un entierro sencillo y sin ornamentos.
El funeral del papa Francisco se celebrará el próximo viernes 26 de abril a las 10:00 horas en la Plaza de San Pedro del Vaticano. La misa será oficiada por el decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re, en presencia de jefes de Estado y delegaciones de todo el mundo. Finalizada la ceremonia, el cuerpo será trasladado a la Basílica de Santa María la Mayor para su sepultura.
El proceso fúnebre comenzará el miércoles 23 de abril con una ceremonia de oración presidida por el cardenal camarlengo, Kevin Joseph Farrell. Luego se realizará la “traslación” del cuerpo hacia la Basílica Vaticana. El cortejo recorrerá la plaza Santa Marta, la plaza de los Protomártires Romanos y la Plaza de San Pedro, ingresando finalmente al templo por la puerta central.
Dentro de la basílica, el féretro será ubicado bajo el baldaquino del Altar de la Confesión, donde se celebrará una Liturgia de la Palabra antes de que comience la visita de los fieles. Aún no se ha definido cuántos días estará expuesto el cuerpo, aunque el protocolo sigue las modificaciones introducidas por el propio Francisco en la nueva edición del Ordo Exsequiarum Romani Pontificis.
El papa Francisco será sepultado en un ataúd de madera con interior de zinc, sin exposición sobre catafalco ni el tradicional báculo papal. Según su testamento, publicado tras su fallecimiento a los 88 años, pidió ser enterrado “en la tierra, de manera sencilla, sin decoración particular y con la única inscripción: Franciscus”. Su sepultura será en un nicho ubicado entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza, en la nave lateral de la Basílica de Santa María la Mayor.