La Corte Suprema dejó firme la sentencia de seis años de prisión e inhabilitación para ejercer cargos públicos contra la expresidenta Cristina Fernández. La decisión se dio días después de que anunciara su precandidatura legislativa.
La Corte Suprema de Justicia de Argentina ratificó este martes la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007–2015), en el marco de la causa conocida como Vialidad. La decisión, adoptada por unanimidad por los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, deja firme la sentencia dictada en 2022 y abre la posibilidad de que Fernández sea detenida en las próximas horas o días.
Según el fallo, la condena se basó en pruebas suficientes y no se vulneraron garantías constitucionales durante el proceso. “El debido proceso ha sido salvaguardado y la recurrente ha obtenido una sentencia fundada en ley”, señala la resolución. El caso investigó supuestas irregularidades en la adjudicación de 51 obras públicas en la provincia de Santa Cruz durante los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, muchas de ellas adjudicadas a empresas del empresario Lázaro Báez.
La decisión de la Corte llega ocho días después de que la exmandataria anunciara su intención de postularse a las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, previstas para septiembre. Al quedar firme la condena antes de la fecha límite para la presentación oficial de candidaturas (19 de julio), Fernández queda fuera de carrera electoral.
El Tribunal Oral Federal N.º 2, que dictó la sentencia original, será el encargado de ejecutar la pena. Debido a su edad —más de 70 años—, la expresidenta podría solicitar prisión domiciliaria, aunque la decisión dependerá de la evaluación del fiscal Diego Luciani, quien llevó adelante la acusación en el juicio.
El presidente argentino, Javier Milei, celebró el fallo a través de redes sociales. “Justicia. Fin. PD: La república funciona”, publicó en su cuenta oficial, junto con críticas a periodistas y sectores que lo acusaban de un presunto pacto con la exmandataria.