Atención: en los próximos párrafos hablaremos sobre el episodio 3 de la 8va temporada de Game of Thrones. Si no lo viste y no querés enterarte de lo que va a pasar, no continúes leyendo!
Ayer se emitió el esperadísimo episodio donde se enfrentaron los vivos y los muertos.
La batalla empezó bien, con ayuda de Melissandre, pero enseguida percibimos que no sería tan fácil. Y no lo fue. Todo lo que podía salir mal, salió mal.
Llegamos al final con un Jon Snow acorralado por el espectro de Viserion, imaginando cómo iba a zafar de eso para rescatarle a Bran, quien estaba a punto de ser asesinado por el Rey de la Noche.
Y de repente, sin que nadie lo advirtiera, salió Arya de la nada y con valentía y mucha viveza, salvó a los 7 reinos. Pero… ¿de verdad nadie lo advirtió?
En realidad, pareciera ser que, desde el comienzo, tanto el arco argumental de Arya como la historia de la daga con la que mató al Night’s King fueron magistralmente enhebrados para que todo acabara como acabó. Había que estar atento.
A continuación, cuatro claves para comprender que el sorpresivo final nos había sido adelantado desde el principio.
1. Melissandre y Arya se encuentran por primera vez en el 6to episodio de la 3ra temporada, y la hechicera le dice que se volverán a ver, y que ella va a cerrar muchos ojos para siempre, entre ellos, “ojos de color azul”. Claramente se refería a los ojos del Night’s King.
2. En la primera tempora de la serie, Ned Stark contrata a un espadachín para que le enseñe a su pequeña hija Arya a usar la espadita («Aguja») que le regaló Jon Snow antes de irse a la Guardia de la Noche. El espadachín es Syrio Forel, originario de Braavos, quien no sólo la entrenó en el arte de la lucha sino que fue una guía espiritual para la niña.
La «Batalla de Invernalia» estuvo plagada de referencias al maestro de Arya, empezando por la «danza» con la que evade a los espectros a mitad del capítulo.
En uno de los entrenamientos, Forel le enseña una técnica que le salvará la vida a Arya varias veces: amagar que va a golpear por un lado y terminar golpeando por otro, aparte de aprender a estar atenta con todos los sentidos.
“Dijiste derecha, pero fuiste por la izquierda”, le recrimina la recién iniciada estudiante al maestro. Y es exactamente lo que hizo Arya cuando asesinó al Rey de la Noche y nos dejó a todos perplejos.
El Rey de la Noche la agarró del cuello, mientras ella sostenía la daga con la mano izquierda inmovilizada. Pero en ese momento ella recordó la lección de Syrio Forel y dejó caer el arma hacia su otra mano, aprovechando el despiste para clavarle el puñal.
Por otra parte, fue también Syrio Forel quien le dijo que a la Muerte -el único dios que él reconocía- se le debe decir «Hoy no», tal como le mencionó en el episodio 8×03 Melissandre a la joven Stark, momentos antes de que fuera a matar al frío villano.
3. La daga que usó Arya para acabar con el Rey de la Noche es la misma que utilizaron cuando quisieron asesinar a Bran, mientras agonizaba en su cama en la primera temporada.
La daga es de acero valyrio y por lo tanto, pertenece a un noble. En la serie no se aclara quién mandó a matar a Bran, pero todo indica que fue el rey Joffrey. La daga estaba en manos de Meñique, quien se la entrega a Bran en la 7ma temporada, cuando se reencuentran todos en Winterfell.
Bran, que es verdevidente y puede ver el presente y el pasado y algunos rasgos del futuro, se la entrega a Arya. Luego, ella se vale del arma para matar a Lord Baelish. Y ayer, al Rey de la Noche.
Así, la misma daga con la cual quisieron asesinar a Bran, terminó salvándole la vida.
https://www.youtube.com/watch?v=f0vy8ON0w1k
4. En el episodio 4 de la 7ma temporada, Arya se entrena con Brienne, en lo que sería un adelanto de lo que fue su enfrentamiento con el Rey de la Noche.
En dicho entrenamiento con espadas, Arya parece estar atrapada por Brienne, pero de repente hace un movimiento, desenvaina la daga que le dio Bran, la cambia rápidamente de mano y le termina haciendo jaque mate a su contrincante.
La verdad que el episodio está para ver una y más veces, y seguir encontrando claves.