El senador Basilio “Bachi” Núñez, líder de la bancada oficialista, salió en defensa de la modificación realizada al reglamento interno de la Cámara Alta, la cual aumenta la cantidad de votos necesarios para destituir a un legislador.
En una entrevista reciente, Núñez explicó que esta modificación, que requiere una mayoría calificada para expulsar a un parlamentario, fue una iniciativa de varios colegas respaldada por su bancada. Afirmó que su postura como diputado, en su momento, siempre fue la de requerir una ley para este propósito, asegurando así la tranquilidad de los electos y proclamados.
El líder de la bancada oficialista negó que esta modificación sea un autoblindaje, alegando que esta medida responde a lo que dicta la Constitución, aunque admitió que el texto constitucional no establece explícitamente la necesidad de una mayoría calificada.
Además, Núñez destacó que muchos senadores del periodo anterior están arrepentidos de haber permitido la suspensión por dos tercios y la posterior destitución por una mayoría simple.
Crítico respecto a la interpretación constitucional, señaló que algunos sectores se atribuyeron el papel de intérpretes constitucionales al no permitir el juramento de algunos electos y proclamados, y ahora su bancada interpreta de manera diferente.
El senador enfatizó que establecer esta medida por ley sería lo más conveniente y justo, especialmente para la minoría opositora, a la que culpó por la falta de quórum en las sesiones.
Núñez concluyó resaltando la necesidad de un marco legal definido para evitar controversias y dar mayor seguridad jurídica a los senadores electos.