El presidente de Corea del Sur afirmó que la cooperación entre Pyongyang y Moscú representa una amenaza global y que se tomarán acciones junto a la OTAN para frenar la escalada. Seúl convocó al embajador ruso para exigir el cese de esta colaboración.
Este lunes, el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, anunció que coordinará con la OTAN medidas de respuesta frente a la creciente cooperación militar entre Corea del Norte y Rusia, incluida la supuesta llegada de tropas norcoreanas a Ucrania. Durante una conversación con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, Yoon subrayó que la invasión rusa de Ucrania y la alianza con Pyongyang amenazan la estabilidad global.
“La seguridad de las regiones del Indo Pacífico y del Atlántico están conectadas, y la alianza entre Rusia y Corea del Norte socava el orden internacional y amenaza la paz en la península de Corea y a nivel global”, afirmó Yoon. Agregó que su gobierno tomará medidas por fases y coordinará con la OTAN respuestas prácticas frente a esta situación.
La llamada entre Yoon y Rutte se produce tras reportes de la inteligencia surcoreana sobre el envío de hasta 12.000 soldados norcoreanos a Rusia para apoyar a las tropas en Ucrania. Según estas informaciones, 1.500 soldados ya están en Rusia aclimatándose antes de ser desplegados en el frente.
En respuesta, Corea del Sur convocó al embajador ruso en Seúl, Georgui Zinoviev, para exigir la retirada inmediata de las tropas norcoreanas. El viceministro surcoreano señaló que esta cooperación militar constituye una amenaza a la seguridad global. Zinoviev, por su parte, defendió la cooperación entre Rusia y Corea del Norte como legítima bajo el derecho internacional.
Desde Moscú, el Kremlin ha reiterado su intención de continuar desarrollando su relación con Corea del Norte, calificando la alianza como un «derecho soberano».