El presidente Santiago Peña instruyó intensificar los controles tras descubrirse un esquema de desvío de armas desde una casa comercial hacia bandas criminales en Brasil, involucrando a policías y militares.
El presidente de la República, Santiago Peña, instruyó este lunes una lucha «implacable» contra el crimen organizado, enfocándose particularmente en el tráfico internacional de armas, tras un operativo realizado en una casa comercial en Asunción, que reveló la venta ilegal de armas a bandas criminales brasileñas.
En una reunión con el ministro de Defensa Nacional, Oscar González, y las autoridades de la Dirección de Material Bélico (Dimabel), Peña se interiorizó sobre el procedimiento y la investigación que sugiere que la tienda “Gunner” vendía armas a militares y policías, quienes luego las desviaban a grupos criminales. «El Gobierno con esto deja un claro mensaje de ser implacables en la lucha contra el crimen organizado», subrayó el ministro González.
Durante la operación, se incautaron varias armas y municiones, las cuales fueron puestas bajo la custodia de la Dimabel. El director de la entidad, Melanio Servín, informó que las investigaciones apuntan a que 55 policías y 46 militares participaron en este esquema, recibiendo pagos de hasta 800.000 guaraníes para retirar armas de manera legal y posteriormente denunciarlas como extraviadas.
Se estima que las 100 armas desviadas tendrían un valor de 1.000 millones de guaraníes, pero en el mercado criminal podrían alcanzar hasta 5.000 millones de guaraníes. El esquema fue descubierto tras una alerta en el sistema de datos de Dimabel, lo que llevó a la intervención en la tienda de armas.
Servín también adelantó que se realizarán inspecciones en todas las casas comerciales que se dedican a la venta de armas, buscando garantizar la transparencia en la comercialización de armas, municiones y explosivos en el país.
Por su parte, el comandante de las Fuerzas Armadas, César Moreno, informó que se ha ordenado a todos los militares presentar una declaración jurada sobre la tenencia de armas personales. De los 100 militares que ya han presentado sus declaraciones, 20 denunciaron el extravío de sus armas en los últimos días.
El ministro González concluyó que el Gobierno no tolerará irregularidades, afirmando que «seremos implacables, no vamos a perdonar este tipo de irregularidades, sean policías o militares».