El exsenador Jorge Querey señaló que el progresismo debe formar parte de cualquier proyecto opositor para evitar una nueva derrota. La reaparición de Fernando Lugo en un acto político refuerza el intento de reactivación.
El exsenador Jorge Querey se refirió al proceso de reactivación del Frente Guasu (FG), bloque político de corte progresista que busca recuperar protagonismo tras la debacle electoral sufrida en 2023. El médico y dirigente manifestó que existe un “fenómeno interesante de reagrupamiento” tanto en el sector progresista como en la oposición, y remarcó la necesidad de unidad para las futuras elecciones municipales y presidenciales.
“Aquí hay que hacer todo el esfuerzo para ganar la presidencia de la República en el 2028. Eso sí, el progresismo debe estar en esa formulación. Si el progresismo no está, puede darse nuevamente un escenario de probable derrota”, expresó en diálogo con la 780 AM.
El Frente Guasu, que llegó a posicionarse como tercera fuerza política en las elecciones de 2013, no logró sostener su caudal electoral en los comicios del 2023. Actualmente cuenta con una sola banca en la Cámara Alta, ocupada por la senadora Esperanza Martínez. Sin embargo, la parlamentaria anunció en marzo su salida de la Concertación y de su partido Participación Ciudadana, con la intención de construir un nuevo espacio político y social.
Las divisiones internas, sumadas a la ausencia del exmandatario Fernando Lugo en las campañas por motivos de salud, debilitaron al bloque progresista. Lugo, quien sufrió un accidente cerebrovascular en 2022, fue una figura clave para la articulación política del FG.
No obstante, su reciente reaparición en un acto político en el distrito de Liberación, departamento de San Pedro, fue valorada por Querey como un paso importante. “Médicamente hablando, él no tiene ningún impedimento. Ayer Lugo habló casi seis minutos con bastante consistencia, con un mensaje pacificador y de construcción”, afirmó.
Querey agregó que el exmandatario “fue, es y seguirá siendo una referencia muy importante de hacia dónde tienen que apuntar los esfuerzos para cambiar el país”, insinuando que su figura aún puede jugar un rol simbólico y político en la reorganización de la izquierda paraguaya.