Los trabajos de conexión a la línea de 500 Kv concluyeron con éxito después de la negativa inicial de Argentina. La obra se llevó adelante por iniciativa unilateral de la Dirección paraguaya de la EBY. Duarte Frutos incluso había amenazado a los argentinos con desembalsar la represa si las trabas seguían.
Boicot de Cammesa a las obras.
Hace unos meses, el director paraguayo de la EBY, Nicanor Duarte Frutos, denunciaba públicamente los intentos por parte de la Argentina de bloquear los trabajos de conexión de la línea 500 kV que permitirá a nuestro país disponer del 100% de la energía que nos corresponde.
Se comunicaba que la empresa Cammesa proponía suspender los trabajos hasta tanto la Argentina complete unos trabajos de reparación de su línea de transmisión.
Esto hubiese significado, por una parte, postergar por un mínimo de un año la finalización de las obras, con graves perjuicios económicos. Por otra parte, hubiese significado dar el brazo a torcer ante un socio que se comportaba como un patrón. En otras palabras, dejar de ser un país soberano.
En aquel momento, los altos intereses del país vecinos buscaron por todos los medios impedir el pleno acceso del Paraguay a su energía.
El 15 de agosto, la Argentina hace un primer planteo dilatorio, invocando presuntos peligros técnicos sin fundamento alguno. La respuesta fue que nuestro país, responsablemente, tenía en su poder numerosos dictámenes de especialistas internacionales asegurando la viabilidad de las tareas. Así que se decidió seguir adelante con el cronograma previsto, aunque los argentinos no se resignaban.
Dias despues, a tempranas horas de la madrugada, debería haberse realizado la conexión de la barra de 500 kV, la maniobra principal. Sin embargo, los técnicos argentinos lo impidieron por la fuerza y usando amenzas de violencia física.
Asimismo, Cammesa dejó labrado en un acta una orden de suspensión de los trabajos, como si la represa fuera de su exclusiva propiedad.
Ante este avasallamiento, técnicos/as y operarios/as de Paraguay iniciaron una resistencia patriótica.
Presencia de Duarte Frutos en la Hidroeléctrica y firma de acuerdo.
El director Duarte Frutos se trasladó personalmente a la Central Hidroeléctrica, forzando a las autoridades del lado argentino a suscribir un acuerdo –que fue dado a conocer públicamente- en el que se comprometían a respetar la realización de las maniobras.
Todo parecía solucionado, sin embargo, la empresa argentina Camessa siguió boicoteando la operación, negándose a colaborar con los informes de reprogramación del sistema argentino. Desde el lado argentino llevaron adelante medidas dilatorias, buscando forzar nuevamente la suspensión de las tareas previstas.
A las 22:00 del dia 29 de agosto, Cammesa nuevamente solicitó aplazar las operaciones, convocando a una reunión técnica para el dia siguiente a las 9 AM, con el fin -supuestamente- de prever cualquier riesgo de colapso energético.
Negativa paraguaya y orden unilateral de proseguir los trabajos.
Sin embargo, la dirección paraguaya de Yacyretá decidió de manera unilateral ejecutar los trabajos de conexión, asumiendo al responsabilidad de todos los riesgos que se pudieran ocasionar. Durante el transcurso de ese día Duarte Frutos llegó incluso a amenazar públicamente a Argentina con desembalsar la represa y diminuir así la producción de energía utilizada por nuestros vecinos.
Tras aquella semana de gran tensión, finalmente los directivos y técnicos paraguayos de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) le ganaron la pulseada a Argentina y esa madrugada se pudieron efectuar las maniobras técnicas para la conexión de la línea de 500 Kv, sin afectar el normal funcionamiento de la Central Hidroeléctrica.
Despues de todo ese intento de frenar las obras, se pudo probar con total éxito la interconexión, y a partir de ahí, hasta hoy se siguió el cronograma previsto de ejecución del contrato, que culminó en tiempo y forma.
El presidente Mario Abdo elogió la entrega y la dedicación de la Dirección paraguaya de la EBY, a cargo de Duarte Frutos, además del tesonero trabajo de los técnicos del lado paraguayo que hicieron posible este hecho histórico. Manifestó además que «Hoy es un día histórico porque después de 25 años podemos decir que Paraguay puede utilizar el 100% de lo que le corresponde de Yacyretá» y destacó la importancia de la obra ya que permitirá «el avance hacia una economía moderna y diversificada, con una nueva matriz productiva.»
Es un ejemplo de la forma en que hay que defender nuestros intereses. Frente a la oposición de nuestros vecinos, que vieron amenazados la disponibilidad de energía en el futuro, los trabajadores paraguayos no se detuvieron. Gracias a eso hoy fue inaugurada la obra que hace real lo dispuesto en el tratado de hace varias décadas.