El día de ayer. El Trueno publicó un video (compartido por el twitero Juan José G.) en donde se podía claramente ver al periodista Héctor Riveros intentando aprovecharse sexualmente de una mujer que se encontraba bajo los efectos probablemente del alcohol.
Hoy, en su cuenta de Twitter, el periodista compartió un «comunicado» donde no le queda otra que aceptar que era él mismo quien aparecía en las bochornosas imágenes.
Dice pedir disculpas a su familia (porque el señor está casado) y se excusa en que había ingerido altas cantidades de bebida alcohólica.
Casi parece un adolescente que llegó tarde a casa y se justifica con su «mami», salvo que en este caso se trata de un hombre adulto, quien utiliza el micrófono a diario para pontificar desde una supuesta posición de autoridad moral.
Lo más patético del comunicado (dirigido a la «opinión pública», como si lo hubiera escrito un personaje relevante para ésta) es que en ningún momento se refiere a la señorita que aparecía junto a él en el video.
Recordemos que se lo veía intentando avanzar a una mujer en estado de inconsciencia, como un macho carroñero de baja estofa. Sin embargo, Héctor Riveros simplemente niega las acusaciones de «abuso», porque aparentemente para él el consentimiento femenino no requiere de una voluntad y un discernimiento.
Por otra parte, jamás hace mención a que todo sucedió durante una celebración del Club Olimpia, del que Riveros dice ser fanático, pero no dudó en mancillarlo. Ni siquiera pidió disculpas por involucrar a la entidad en hechos de tan desagradable índole.
A la opinión pública: pic.twitter.com/nvcvLEm74Z
— Hector Riveros (@HECTORIVEROS) July 22, 2019
Si no fuera porque una mujer fue víctima de la rapacidad de este hombre, la situación sería realmente graciosa: se trata de una lacra, que se autoerige «faro moral» diariamente cuando realiza su devaluado programa radial, pero que cuando se apaga el micrófono no es otra cosa que un animal predador.
Un exponente más de la hipocresía periodística que contamina los medios paraguayos.
Luego de la patética publicación, las redes sociales explotaron de indignación y de risa:
¿En qué momento pedis disculpas a la señorita? Excusar conductas que violan la integridad de una persona con consumo de alcohol, y minimizar el hecho diciendo “abuso”, “acusaciones exageradas” como si fuera nada; fue ABUSO Héctor, terrible, degradante y triste.
— Ale Sciacca (@alehale) July 22, 2019
Te aprovechaste de ella, ahora usas de excusa el alcohol como un pibe de 15 años? Te cagaste todo porque se te pilló verdad?
Simpática la vida en darte una esposa e hijos. Sos un sinvergüenza.— Mar (@zepplna) July 22, 2019
Tranquilo!
Al menos desde ahora se comprobó que no sos puto.— Silfred Tijera 🇪🇸 (@SilverTijera) July 22, 2019
Lamento muchísimo por tu esposa y tu familia. Y también siento muchísimo por la chica que fue expuesta, y SÍ fue abuso, porque cuando hay alcohol de por medio con una mujer, no hay pleno consentimiento del acto sexual.
Hacerse responsable de todo es el camino y no minimizar.
— Tanya (@tanbettoni) July 22, 2019
Todos te vimos. Te vimos agarrarle la mano a una chica incapaz de defenderse, haciendo que te toque.
— Holli Would (@boludatropical) July 22, 2019
Deja de culpar al alcohol payaso, millones somos los que bebemos y no tenemos una actitud tan lamentable como la tuya
— Leo (@leoocazal) July 22, 2019