Las drásticas medidas adoptadas por el director de la Entidad, Nicanor Duarte Frutos, se suman a los 8 funcionarios despedidos la semana pasada. Con todo lo ahorrado con las prácticas de austeridad, se invertirá en desarrollo humano: educación, salud y producción.
Fin del festín con la Entidad Binacional Yacyretá (EBY). Así lo anunció hoy en conferencia de prensa su director, Nicanor Duarte Frutos. En conferencia de prensa explicó que, a los 8 despidos realizados la semana pasada, se sumaron 10 sumariados sin goce de sueldo y 85 casos en revisión por excesos de reposos médicos y/o dudosos certificados de reposo.
Las medidas de austeridad corresponden a un programa de reorganización y reordenamiento institucional, orientado al saneamiento de la EBY, tanto tiempo objeto de abuso por parte de la clase política, que llevó a duplicar la cantidad de funcionarios de la margen paraguaya en relación con la argentina, en relación de 1950 a 750.
Además, se han adoptados disposiciones para reducir el alto número de comisionados de la EBY a otras instituciones del Estado, así como limitar el pago de horas extraordinarias y de viáticos.
Con todo lo ahorrado, que hasta ahora es de aproximadamente ₲ 16.500 millones, se redireccionarán los recursos para la implementación de políticas de desarrollo humano del Poder Ejecutivo, tanto en el área de la educación, como de la salud y la producción agropecuaria.
En este sentido, Duarte Frutos explicó que se instalarán tres nuevas unidades de terapia intensiva en hospitales del área de influencia de la Entidad. Asimismo, se invertirá en los Consejos Departamentales de Salud.
En el sector de la educación, se incrementarán las becas para que jóvenes universitarios del departamento de Ñeembucú accedan a la universidad, pasando de los 684 actuales a 1.000 estudiantes, en el transcurso del presente año. Por otra parte, se construirán 80 nuevas aulas, no solamente en el área de influencia de la Entidad, sino también en otras zonas del país socialmente vulnerables.
El jefe administrativo de la Entidad, Alejandro Takahasi, explicó que entre los casos de abusos detectados, se registran reposos de hasta 320 días, en un caso, y 287, en otro, siendo que el máximo establecido por ley es de 180 días, luego de los cuales los legajos deben ser remitidos al Instituto de Previsión Social (IPS), para que allí sean objeto de estudio por parte de una junta médica.