Víctor Raúl Benítez, economista paraguayo y editor en varios medios económicos especializados, sostiene que la posición económica del Paraguay es la mejor en el Cono Sur.
El economista Víctor Raúl Benítez presentó su análisis sobre las posibilidades futuras que presenta la economía, en una entrevista mantenida con la emisora Radio Ñanduti.
Para Benítez, la posición del Paraguay es la más privilegiada de América del Sur. Sostiene que los elementos que hacen ideal la pronta recuperación económica de nuestro país, recaen en factores como: la baja presión tributaria, la baja densidad poblacional y la baja carga viral, que al parecer está circulando en el país.
De acuerdo a su criterio, estos hechos nos ponen, dentro de todo, en una buena situación en relación a nuestros vecinos. Según Benítez, la recuperación de Brasil llevará 5 años y la de Argentina, 10. Recién en ese momento sus economías volverán a tomar vuelo.
Es por eso que Benítez sostiene que Paraguay se recuperará hacia finales del año 2021 y que lo que actualmente estamos atravesando es comparable a una especie de «dolores de parto».
Este economista también dijo descreer que las mejoras económicas vendrán de la mano de políticas fiscales y tributarias, sino que la vuelta a la senda del crecimiento económico vendrá de la mano de la inversión privada, especialmente de aquellas iniciativas que durante la pandemia se vieron beneficiadas con más ventas y mejores ingresos.
Explicó también, que la situación global hará que la industria nacional se fortalezca en muchos aspectos, ya que ante el cierre de muchos mercados y la disminución de las importaciones, los grandes beneficiados serán los productores nacionales, que tendrán que abastecer el mercado interno, como hace tiempo que no ocurría.
El proceso de “substitución de importación” es un factor que puede ser muy importante en la regeneración de la economía nacional, señaló.
En este sentido, es importante remarcar que los procesos de sustitución de importaciones han generado, históricamente, altos niveles de empleo y aumento del PIB, con el desarrollo del mercado interno.
Esta circunstancia augura un muy buen porvenir para los paraguayos y paraguayas, con probable crecimiento de la clase media y disminución de los niveles de pobreza e indigencia.
