Experto internacional afirma que la ciudadanía no será precisamente la que mayor ventaja tenga en una eventual eliminación del ISC a los hidrocarburos. Señaló que la experiencia vivida en Alemania así lo confirma.
La propuesta de quitar el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) a los combustibles no beneficiará a la población, sino a las distribuidoras, que registrarán un mayor margen de ganancia en sus operaciones.
Así opinó el doctor en Economía Juan Luis Jiménez, profesor titular de la Universidad de las Palmas de Gran Canaria (España), en diálogo con periodistas de radio Monumental 1080 AM.
«Una bajada de impuesto para este sector aumentará más los beneficios para las distribuidoras, no así para beneficio de la ciudadanía, incluso el precio puede aumentar más», explicó el especialista.
«Una bajada en los impuestos no necesariamente va a suponer la reducción del producto, eso se demostró en Alemania», añadió el profesional.
«Estamos en un mercado donde la materia prima es común para todos. En este rubro se habla del efecto cohete y pluma, cuando el crudo sube, el precio del producto sube rápidamente y cuando baja el crudo, la baja es como la pluma», manifestó.
«En este mercado en el mundo tiene muy poca competencia y la necesidad es alta», puntualizó el experto.
Cabe señalar que hoy el Senado analiza el proyecto de ley que crea un Fondo de Estabilización de los precios del Combustible, presentado por el Poder Ejecutivo, mediante el cual se fijan recursos por un valor de 100 millones de dólares para contrarrestar la fluctuación de los precios del crudo.
