Ante las denuncias de fraude y la proclamación de Nicolás Maduro como vencedor, Brasil y Colombia sugieren realizar nuevos comicios presidenciales, opción descartada por la oposición que reivindica el triunfo de Edmundo González Urrutia.
Brasil y Colombia propusieron este jueves repetir las elecciones presidenciales en Venezuela, tras la polémica proclamación de Nicolás Maduro como ganador en medio de denuncias de fraude. La oposición, liderada por María Corina Machado, afirma que su candidato, Edmundo González Urrutia, fue el verdadero vencedor y rechazó cualquier posibilidad de nuevos comicios.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) declaró a Maduro ganador de las elecciones del 28 de julio con un 52% de los votos, pero aún no ha presentado detalles del escrutinio, alegando un “ataque ciberterrorista”. En contraste, la oposición publicó en un sitio web copias de más del 80% de las actas, que, según aseguran, prueban la victoria de González Urrutia con el 67%.
Estados Unidos también señaló que es “absolutamente claro” que el opositor resultó vencedor, retractándose de comentarios previos del presidente Joe Biden que sugerían apoyar nuevos comicios. No obstante, Brasil y Colombia encabezan los esfuerzos diplomáticos para resolver la crisis postelectoral, mientras México, que había sido parte del diálogo, se ha distanciado en espera de un fallo de la Corte Suprema venezolana.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva propuso convocar elecciones con la participación de todos los candidatos y observadores internacionales. Gustavo Petro, presidente colombiano, también abogó por nuevos comicios libres, vinculando la propuesta al levantamiento de sanciones económicas contra Venezuela.
Sin embargo, tanto Maduro como la oposición rechazan la idea de repetir los comicios. El líder chavista ironizó: “¿Gané la partida de dominó y pido que se repita?”. Por su parte, González Urrutia declaró que el 28 de julio ya se celebraron las elecciones y que él ganó de manera contundente.
La oposición insiste en que la soberanía popular se respete y rechaza la sugerencia de ignorar lo ocurrido. Mientras tanto, la situación sigue generando tensiones, con protestas en Venezuela que han dejado 25 muertos y más de 2.400 detenidos.
En paralelo, la Asamblea Nacional venezolana, dominada por el chavismo, aprobó una ley que regula las actividades de las ONG, suscitando preocupaciones entre activistas de derechos humanos sobre una posible restricción de derechos civiles.
El panorama en Venezuela sigue siendo complejo, con una oposición que se mantiene firme en su postura, un gobierno acusado de manipulación electoral, y la comunidad internacional dividida en cuanto a la solución de la crisis.
