Un japonés, aparentemente curado de coronavirus, volvió a dar positivo en un test, tres semanas después de haber dejado el hospital en el que estaba internado. Esto pone en duda que quienes se recuperan queden inmunizados.
Los científicos de todo el mundo e creían que, tras haber contraído el coronavirus y recuperarse de la enfermedad, las personas quedaban inmunizadas. Ahora, parece que esto no es así, ya que un japonés de setenta años volvió a contraer el virus y esto aumenta la alarma de los infectólogos y epidemiólogos a cargo de monitorear su avance.
El paciente era pasajero del crucero Diamond Princess, que estuvo en cuarentena cuando se descubrió que muchos de sus pasajeros padecían COVID-19. El 14 de febrero fue diagnosticado con la enfermedad y fue confinado en un hospital donde se le proporcionó el tratamiento adecuado. El 2 de marzo el test de coronavirus le dio negativo, así que le dieron el alta y abandonó el nosocomio.
Las noticias felices para este septuagenario nipón pronto desaparecieron, puesto que tan solo 3 semanas después el hombre volvió a contraer coronavirus, presentando nuevamente síntomas y fiebre alta. Efectivamente, el test confirmó que contrajo de nuevo el COVID-19.
Según el diario británico The Independent, no es la primera persona que reincide en la infección: una mujer de 40 años, también japonesa, volvió a enfermarse luego de recuperarse de varios días de estar hospitalizada en condiciones graves.
El coronavirus es un agente infeccioso recientemente descubierto, hace tan solo 10 semanas, por lo cual hay mucho desconocimiento sobre su naturaleza, desarrollo y prospectiva. Se cree que podría tratarse de una enfermedad bifásica, la cual daría la impresión de terminar antes de volver a dar complicaciones en la salud por segunda vez.
Las personas que ya han sido infectadas deben seguir el mismo protocolo de prevención que aquellas que se encuentran sanas, esto es, lavarse las manos, mantener distanciamiento social, cuidar la higiene de superficies, no tocarse la cara, toser o estornudar cubriéndose con el pliegue del codo.