La banca matriz reportó que el pasado mes estuvo caracterizado por una recuperación generalizada de los precios de consumo, habiéndose observado variaciones positivas leves en casi todas las agrupaciones del índice.
En un boletín emitido por el Banco Central del Paraguay se informó que la inflación del mes de julio del año 2020, medida por la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC), fue del 0,5%, superior a la tasa del -0,1% observada en el mismo mes del año anterior.
Con este resultado, la inflación acumulada en el año asciende al -0,3%, por debajo del 1,5% verificado en el mismo periodo del año 2019. La inflación interanual, por su parte, fue del 1,1%, superior a la tasa del 0,5% registrada en el mes de junio del corriente año, pero menor a la tasa del 3,1% registrada en el mes de julio del año pasado.
Por otro lado, se señala que la inflación núcleo se situó en un nivel inferior al de la inflación total mensual (en 0,3%). Así, la inflación interanual medida por este indicador, alcanzó una tasa del 1,5%, superior a la tasa del 1,3% registrada en el mes de junio del corriente año, pero por debajo de la tasa del 2,8% verificada en el mes de julio del año 2019.
De acuerdo al informe del BCP, el resultado de la inflación del mes de julio estuvo caracterizado por una recuperación generalizada de los precios de consumo, habiéndose observado variaciones positivas leves en casi todas las agrupaciones del índice, destacándose las subas de precios verificadas en alimentos, bienes duraderos y algunos servicios de la canasta.
En los bienes alimenticios, se destaca el incremento en los precios de la carne vacuna, luego de cinco meses de bajas consecutivas. Según referentes del sector cárnico, dicho aumento se debe, por un lado, al inicio del periodo de vacunación, que abarca del 6 de julio al 14 de agosto y que restringe el movimiento de animales en feria, limitando la oferta y, por otro lado, a una mayor exportación en el mes de junio de 2020, dada la reapertura gradual de los mercados de la carne.
En esa misma línea, algunos bienes sustitutos de la carne vacuna, como la carne de aves, de pescado y las menudencias, también registraron aumentos de precios. Asimismo, en la agrupación de alimentos, se observaron subas de precios en productos panificados, productos lácteos y aceites.
Por su parte, las bebidas alcohólicas, como la cerveza y el vino, verificaron aumentos de precios en el mes de referencia. Esto, tras tres meses de reducciones consecutivas, al tiempo que esta suba también sugiere un mayor consumo de este tipo de productos relativo a meses previos, explicado en cierta medida por la reapertura paulatina de bares y restaurantes, y por la rehabilitación de reuniones sociales entre un número limitado de personas.
Con respecto a los gastos en salud, se verificaron incrementos de precios en los productos farmacéuticos, consultas médicas, servicios de laboratorio, ecografía, radiografía, resonancia magnética y servicios hospitalarios. Esto se explica, en gran parte, por la mayor demanda observada para este tipo de productos y servicios, en línea con el contexto sanitario actual.
En relación con los precios de los bienes para el mantenimiento de la vivienda, en julio se volvió a observar un incremento en el precio del cemento y del ladrillo. Esto a su vez, estuvo acompañado por las subas registradas en el vidrio, las pinturas y los accesorios para el baño. El aumento de la demanda, generada por la normalización de las actividades de construcción privada desde el mes anterior, explicó en gran parte este resultado.
Finalmente, los bienes durables de la canasta registraron subas de precios, en especial en aquellos rubros de origen importado. En este grupo destacan los aumentos de precios de los computadores personales, autovehículos y electrodomésticos para el hogar. Este comportamiento está explicado en gran medida por el aumento del tipo de cambio guaraní/dólar norteamericano observada en el transcurso del mes.