Según el medio británico Financial Times, el Paraguay habría pedido a Taiwán inversiones directas en el país por, al menos, USD 1.000 millones, de manera a amortiguar las dificultades surgidas por no poder ingresar al mercado de China Continental.
El Paraguay es uno de los pocos países en el mundo que mantiene relaciones diplomáticas con la República de China, más conocida aquí como Taiwán. Ante este hecho, los productos paraguayos no pueden ingresar al mayor mercado para los alimentos del mundo: China.
Según una nota divulgada por el prestigioso medio británico Financial Times “el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, ha pedido a Taiwán que invierta $ 1 mil millones en su país para ayudarlo a resistir la presión «enorme» para cambiar el reconocimiento diplomático a su rival China”.
Sucede que en Paraguay hay un lobby cada vez mayor de los productores agrogananderos para que el Gobierno rompa relaciones con Taiwán y establezca vínculos diplomáticos, que se convertirán en comerciales, con Beijing.
Según la publicación en cuestión, Abdo habría referido que “estamos trabajando con el presidente de Taiwán . . . para que el pueblo paraguayo sienta los beneficios reales de la alianza estratégica”.
De acuerdo con la publicación periodística, que aún no fue confirmada ni desmentida en Paraguay, Abdo habría señalado que “hay una inversión taiwanesa de más de USD 6 mil millones en países que no tienen relaciones diplomáticas con Taiwán, queremos que de eso USD 1 mil millones se pongan en Paraguay…eso nos ayudará a construir el argumento sobre la importancia de esta alianza estratégica con Taiwán”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán también fue citado en la publicación, y fuentes habrían referido que “la esperanza de Abdo de USD 1 mil millones en inversión taiwanesa tendría un significado profundo para la asociación estratégica Taiwán-Paraguay”.
“Paraguay es un importante exportador de soja y carne vacuna, pero sus relaciones con Taiwán, que Beijing reclama como parte de su territorio, le han costado el acceso al vasto mercado chino. Esto ha molestado al poderoso lobby agrícola de la nación sudamericana”, reza una parte del texto.
“Imagínese lo que dicen los productores cuando los precios de la carne caen y no tienen acceso a China”, dijo Abdo. “Te preguntan: ‘Por favor, tenemos que abrirnos al mercado chino. ¿Qué nos da Taiwán cuando somos un país que podría vender toda su producción de soja y carne a China?’”
El Financial Times hizo mención además a “un estudio publicado en la revista Foreign Policy Analysis” publicado el año pasado donde se estimó que la alianza de Paraguay con Taiwán le costó el equivalente al 1% del producto interno bruto por año en ayuda e inversión perdidas entre 2005 y 2014.
“Paraguay recibió nada de China”, escribieron los autores. “Esto no fue compensado por los flujos de Taiwán”, dice el estudio citado en el artículo.
El medio además se hizo eco de las dificultades que atravesó el Paraguay para conseguir las vacunas contra el Covid, ya que China es uno de los principales productores de inmunizantes.
“A pesar de las dificultades de la vacuna, Paraguay demostró ser una de las naciones mejor preparadas para hacer frente a la Covid-19 gracias a su estabilidad y disciplina macroeconómica, según el Banco Mundial. El PIB se contrajo solo un 0,8 por ciento en 2020 y se recuperó a un crecimiento del 4,2 por ciento el año pasado. Abdo dijo que esperaba que creciera un 2,0 por ciento este año”, agregó el FT.
“Según Tom Long, de la Universidad de Warwick y autor del estudio Foreign Policy Analysis, la alianza con Taiwán trajo beneficios para Paraguay en medio de tensiones sobre otros temas entre el gobernante partido Colorado de Abdo y la Casa Blanca”, afiman.
Consultado sobre el tema, Long habría señalado que “Paraguay puede ganar la atención y el favor de Taiwán y de algunas figuras en los EE. UU., de una naturaleza que los estados más pequeños no suelen recibir”.
A pesar de que la cuestión no recibió comentarios por parte de altas autoridades del Ejecutivo, es innegable que la cuestión Taiwán está en agenda, debido a la fuerte presión de los sectores productivos que quieren ingresar al mercado chino.