En una muestra de intolerancia política, manifestantes ponen en peligro la seguridad emocional y física de dos niñas inocentes.
Manifestantes en Ciudad del Este protagonizaron en la fecha un violento escrache contra el concejal Alejandro Zacarías, hijo del diputado Justo Zacarías, luego de que este pasara por la escuela a la que asisten sus dos hijas menores de edad para recogerlas.
Zacarías pasó frente a un grupo de manifestantes que cuestionan la polémica presencia de su familia en el Alto Paraná y estos procedieron a tirar objetos y basura contra el parabrisas del auto, hecho ante el cual las niñas se mostraron sumamente asustadas y prorrumpieron en llanto, mientras su padre intentaba calmarlas diciéndoles: “No pasa nada”.
Más allá de las intenciones de los que llevan adelante actos de protestas, resulta inadmisible la agresión a menores que no tienen responsabilidad alguna en los hechos que son cuestionados a los mayores.
En el fondo, este tipo de prácticas solo traduce intolerancia política, profundizando el autoritarismo y la violencia, razón por la cual es importante delimitar dónde comienza el derecho a la manifestación y dónde comienza el de los demás, sobre todo cuando se trata de menores de edad, protegidos especialmente por la ley.
Mirá el video:
Hasta donde llegan para obligar a todos a hacer lo que ellos quieren!!#ConLaViolenciahttps://t.co/u45irk887n pic.twitter.com/xoeD5yP4LK
— AleZacariasMc (@AleZacariasMc) June 24, 2019
