Greta Thunberg es una joven activista sueca y está revolucionando la política europea. La ecologista de 16 años de edad recorre Europa para llevar su mensaje de cuidado del medio ambiente, ante el peligroso calentamiento global que amenaza con destruir gran parte del planeta y dejarlo inhabitable para las próximas generaciones.
El mensaje de Thunberg no tiene nada de original: la ciencia ha acreditado el cambio climático y los peligros que éste conlleva hace ya mucho tiempo. Sin embargo, la frescura de Greta, su militancia en las redes y su pregnancia entre los jóvenes hace que su campaña por el cuidado del planeta se vuelva masiva y tiene un impacto pocas veces visto.
Thunberg, quien fue diagnosticada autista, utiliza las redes sociales para dar a conocer sus posiciones y sus acciones, pero cree que el verdadero cambio debe gestarse en las calles. Luego de una ola de calor en su Suecia natal, la adolescente decidió faltar un viernes de 2018 a clase y declararse en «huelga escolar por el clima».
El impacto fue tal que decidió continuar su huelga cada viernes y empezó a inspirar a miles de jóvenes de su edad, mayormente europeos, quienes se le sumaron repitieron la iniciativa en sus países. Para fines de 2018, la pequeña Greta ya había dado una charla TED y había sido invitada a manifestarse en la Cumbre climática de las Naciones Unidas, en Polonia y en el Foro Económico Mundial.
Ahora, en época de vacaciones estivales en Europa, Thunberg está recorriendo el viejo continente para concienciar a los políticos. Ya estuvo en Alemania y en Francia, donde fue distinguida con un galardón. Incluso fue nominada al premio Nobel de la paz.
Si bien muchos políticos están en contra de Thunberg, pues creen que está siendo manipulada por grupos ecologistas, lo cierto es que la adolescente llevó el asunto del cambio climático a la primera plana de los diarios y el impacto de sus intervenciones es innegable.
Su figura da cuenta de que las causas por las que se movilizan los ecologistas son muy importantes pero que éstas, como toda demanda política, necesitan de líderes carismáticos y de medios masivos, como las redes sociales, para despertar el interés del público.
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