Los anticuerpos generados en un alto porcentaje de la población a raíz de la variante Manaos produjeron una suerte de “colchón” que evitó el fuerte impacto de la Delta, que sí causó estragos en el hemisferio norte, explicó una científica del Conacyt.
La doctora Graciela Russomando, investigadora científica del Conacyt, manifestó que la variante Delta difícilmente cause estragos en el Paraguay.
En diálogo con abc Cardinal, la profesional explicó que la primera variante más peligrosa que recibió el Paraguay fue la de Manaus (Gamma), que tenía, dijo, un altísimo poder de evadir el sistema inmune primario y una capacidad de infección muy alta, generando lo que en el vocabulario laboratorial se denomina “alta carga viral”.
“Entonces, cuando nosotros hacíamos el análisis, lo que circulaba el año pasado era una carga viral en el hisopado relativamente baja; mientras que en marzo, abril y mayo ya eran personas que tenían altísima carga viral, por eso había mayor cantidad de personas infectadas”, señaló Russo a la mencionada emisora.
“Cuando surge la variante Delta, si bien tenía mutaciones diferentes, la estructura general del virus también era similar dentro de la cepa. Nosotros somos seres biológicos, por lo tanto, con esta cepa de Manaus ya recibimos tantos anticuerpos, que los que hemos generado un muy buen nivel de anticuerpos protectores”, señaló la científica.
Con Manaus, añadió, que afectó a unas 400.000 personas en el Paraguay, se preparó una suerte de “colchón” que ayudó a evitar un impacto muy fuerte de Delta, que sí tuvo una repercusión muy violenta en los países del hemisferio Norte.
