Para acceder a la vacuna contra la fiebre amarilla, no es necesario ir hasta  la capital del país, puede recibir la dosis en el vacunatorio dependiente del Ministerio de Salud más cercano a su domicilio, sea éste una USF, puesto de salud, centro de salud u hospital, en cualquier punto del territorio nacional. Esta vacuna solo se aplica una vez en la vida.

En el caso de que solo precise del Certificado Internacional de Vacunación para viajeros, el documento se expide en los hospitales regionales de cada departamento del país. El certificado debe portarlo obligatoriamente todo viajero nacional y extranjero que provenga o se dirija a zonas de riesgo, se presenta al ingreso y salida del país y es una exigencia en los puestos de control migratorio, terrestres, fluviales y aeroportuarios.

Se resalta que para contar con el Certificado Internacional de Vacunación no es necesario volver a aplicarse la vacuna, solo se requiere presentar el carnet de vacunación que acredite la aplicación de la dosis antiamarílica. Este certificado se expide de forma gratuita y se otorga en el momento. No requiere visación y tiene una duración de por vida.

En caso de extravío del carnet de vacunación

No será necesaria una nueva aplicación de la vacuna. Se recomienda acudir hasta el vacunatorio donde recibió la dosis, para que le expidan un nuevo carnet de vacunación. Es importante tener en cuenta que el registro de vacunación lo puede obtener únicamente en el vacunatorio donde recibió la dosis antiamarílica.  

Importante

Se resalta que la vacunación contra Fiebre Amarilla y contra COVID-19, debe tener siete días de intervalo entre una aplicación y la otra.

Sobre la fiebre amarilla

Es una enfermedad viral, transmitida por la picadura de mosquitos infectado, se presenta con fiebre, dolor de cabeza, ojos y piel amarillos (ictericia) y también, produce dolores musculares, náuseas, vómitos y cansancio. La vacuna es la principal medida de prevención de la enfermedad. 

La vacuna contra la fiebre amarilla está contraindicada para:

– Niños menores de 6 meses.

– Embarazadas.

– Personas de 60 años y más.

– Personas con antecedentes de alergia a cualquiera de los componentes de la vacuna como huevo, proteínas de pollo o gelatina.

– Para quienes tengan alteraciones del sistema inmune, incluyendo la infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH).

– Personas con enfermedad del timo, miastenia gravis, síndrome de Digeorge, con tumores malignos, trasplantes de órganos y patologías que requieran tratamientos con inmunosupresores.