La hipótesis principal apunta a que la orden de asesinar a Marcelo Pecci provino del Primer Comando Capital (PCC) y debía ocurrir en Paraguay o en cualquier parte del mundo, dijo el director de la Policía de Colombia, José Vargas.
El fiscal general colombiano, Francisco Barbosa, indicó que existe un equipo fiscal y policial en Paraguay cooperando para corroborar los casos llevados por Marcelo Pecci, y avanzar en la investigación de quienes ordenaron el atentado.
La hipótesis principal apunta a que la orden provino del Primer Comando Capital (PCC) y debía ocurrir en Paraguay o en cualquier parte del mundo, dijo el director de la Policía de Colombia, José Vargas.
Ante esta orden, existió un articulador del atentado en Colombia, ya detenido. Esta persona fue la que contactó a los dos sicarios y a las dos personas que hicieron el seguimiento a Pecci y su esposa, quienes se encontraban de luna de miel en la ciudad de Cartagena.
El seguimiento a la pareja fue desde el 2 de mayo hasta la fecha del ataque, el 10 de mayo. Las personas que hicieron esta tarea inclusive se hospedaron en el mismo hotel en las Islas Barú. El fiscal general colombiano agregó que las publicaciones en redes sociales del fiscal y su esposa contribuyeron a los atacantes saber su ubicación exacta.
La investigación en Colombia analizó cámaras de video y publicaciones de redes sociales, interceptó celulares, y entrevistó a testigos de los días previos y del momento del atentado. Con esto se recopilaron 120 evidencias directas contra los cinco detenidos, lo que llevó a que cuatro de ellos acepten ayer lunes su responsabilidad en los hechos.
También se conoce la participación de una sexta persona que consiguió escapar hacia Venezuela y se activó la alerta azul de la Interpol, informó el comisario Vargas.
El motivo del asesinato guarda relación con la actividad del fiscal Marcelo Pecci en casos contra el narcotráfico y el crimen organizado.
