Los pasados días, una famosa presentadora de televisión de Estados Unidos, Lara Spencer, se rió de que el pequeño George, de 6 años, tome clases de ballet en la escuela a la que asiste en la capital de Inglaterra. Días después debió reconocer su error tras el repudio del público.
Según informa El país, Spencer, quien sale diariamente en su programa de TV «Good morning América» hizo un comentario muy desafortunado sobre George, heredero al trono del Reino Unido, hijo de los príncipes William y Kate de Cambridge y nieto del Príncipe de Gales, Carlos, y la difunta y querida Lady Di.
«El príncipe William dice que George adora el ballet. Tengo algo que decirte, William: a ver cuánto le dura«. La frase fue interpretada como queriendo decir que la actividad no es propia de un niño, quien prefiere jugar a la computadora o con sus juguetes.
Spencer fue enseguida repudiada por los bailarines de todo el mundo por desprestigiar su profesión. Incluso, desde sindicatos de profesionales del ballet organizaron escraches hacia ella. Quisieron dejar en claro que el mundo evolucionó y hay muchísimos hombres que se dedican al baile y buscaron defender al principito.
La presentadora pidió disculpas públicas y calificó sus dichos de «insensibles».
